No creo en las fronteras, ni en las razas, sólo busco la respuesta a la pregunta que durante siglos nos hemos hecho los seres humanos: ¿ Qué es el hombre?.
No hay respuesta. Raza sólo hay una: la humana, lo demás son levitaciones inconsistentes y partidistas de mentes enfermas que lo único que buscan es la autosatisfacción a costa de la humillación del otro, o simplemente la obtención del poder.
¿Quiénes somos? en realidad hemos avanzado, o solamente es la tecnología la que lo ha hecho.
En mi opinión seguimos miccionando en los troncos de los árboles para marcar nuestro territorio, y arañamos con nuestras uñas sus cortezas para advertir de nuestra presencia, para amenazar al diferente.
Somos más inteligentes que el oso pardo, pero como él, sentimos el primitivo instinto de la territorialidad, del temor a lo desconocido...¿hemos avanzado pues?, o estamos realmente en franco retroceso.
¿Nos estamos humanizando o convirtiendo en animales instintivos? es decir, en lo que éramos antes, y que me perdonen los creacionistas, monos salvajes, dominantes y territoriales. ¿Volvemos acaso a reivindicar la selección de la propia raza? ¿queremos sobrevivir los más fuertes, los mejor dotados y dejar perecer a los débiles?
Ese no me parece un buen camino para la paz y la concordia, más bien temo que se convierta en un escenario de crispación, intolerancia y odio...
¿Quién sabe quién hay detrás del teclado que ahora escribe? ¿soy musulmán, cristiano, negro, chino, gay?
¿ cambiaría eso en algo vuestra manera de pensar hacia mí?
Repito, y repetiré: abajo las banderas, abajo las fronteras y luchemos por una aldea global, es el único camino para la paz, comprendámonos , y sobre todo escuchemos, no nos limitemos a oir, ESCUCHEMOS.
