Como mi padre comenta en el post, conozco a Iván de toda la vida, desde que íbamos al colegio, somos...éramos vecinos y recuerdo que cada vez que me compraba una moto nueva venía a verla a casa y bromeábamos sobre cuál sería la siguiente...
También recuerdo los consejos que le dimos cuando se compró su primera moto de marchas, una Honda NS-1 50:
1) Ponte siempre en lo peor y anticípate
2) Nunca te distraigas
3) Acelerar sabemos todos, pero frenar no es tan sencillo
- Recuerdo lo que le costó comprarse la R6 y su cara de felicidad el día que me pidió que le acompañara al taller a por su flamante moto...
- Recuerdo oirle por las mañanas, tardes y noches cuando iba o volvía del trabajo...
- Recuerdo la voz de mi padre cuando me llamó para decirme que ya no volveríamos a oirle...
- Le recordaré cada vez que pase por delante de su casa, le recordaré cada vez que coja la moto, le recordaré cada vez que vea una R6, le recordaré.......siempre.
Ivan nos queda el consuelo, si se le puede llamar así, de que tus órganos siguen dado vida...
Te queremos :'(