Aviones, Trenes, Automóviles... y una RT!
- Autor Camellero
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Camellero
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Pues bien, vamos a regresar el reloj a Marzo del 2017, cuando llegué con mi hijo Marco a Munich para llevarnos la moto al Reino Unido, solo para encontrarnos con la agradable sorpresa de que los burros del concesionario BMW habían removido los faros LED que tanto aprecio. En fin, lo acepté como un error humano - que suceden - y volvía dejar la moto ahí con ellos con la condición de que los volvieran a instalar previo a mi llegada. Ya hecho al trato, regresamos a Dubai y a planear el próximo intento, que por suerte sería al mes siguiente, en Abril.
Esta vez tendré que ir solo por el calendario escolar de mi hijo, y afortunadamente hay asientos disponibles de sobra en el vuelo así que por ahora todo va en marcha, teniendo cuidado de avisar a BMW de mi llegada para que tengan la moto preparada.
Abril 21, 2017
Como siempre, voy con los nervios de costumbre cada vez que salgo a mis viajecitos, por dejar a la familia sola (que es puro neurotismo, pues Dubai es mucho muy seguro) y por tener que frenar a la imaginación por lo que pudiera pasar. Las cosas que piensa uno a veces.
Aunque suene simple, el proceso de irme a motear es arduo, y por ahora tengo la suerte de que solo necesito un vuelo para llegar a la moto, al contrario de otras veces, y como quiero aprovechar el tiempo lo más posible, he decidido tomar el vuelo que sale a las 3am para llegar a Munich temprano y utilizar el día al máximo. Otra desvelada más, pero no me importa en lo absoluto (en esas fechas aún tenía la energía para hacer esos circos, ahora ya no).
A estas horas el aeropuerto está vacío
El vuelo va casi lleno, pero alcancé asiento...
Y de los buenos!
Mariposas en el estómago por dejar a la familia. Como siempre.
El vuelo transcurrió sin problemas, al llegar a Munich tomé el tren regional a la ciudad y de ahí directo al conce a por la moto.
Hasta ese momento todo iba a pedir de boca y de acuerdo al plan maestro, lo cual cambió en un instante cuando me dicen que la moto no esta lista, pues están trabajando en ella… ¿QUE QUEEE?? Esto es de no creerse, han tenido un puto mes entero para trabajar en la moto (y arreglar su propia cagada) y ahora sucede que lo han dejado hasta el último día! Tengo la cara demudada del coraje, y aunque no acostumbro ponerme violento ese día sí me dió mucho gusto pegar de gritos y recordarles a estos imbéciles el porqué han perdido dos guerras mundiales.
Para colmo, no pueden montar los faros de nuevo porque al removerlos rompieron uno de los switches, y por supuesto que no tienen la pieza pues es parte del kit de los faros.
Les digo que me voy tal como tal, con los faros en la bolsa, pero exijo que me den por escrito algo donde se comprometen a cubrir el costo total de las piezas de repuesto y la mano de obra para reparar el daño, lo que hacen de inmediato y de buena manera.
Todo este drama me ha demorado mucho, llegué aquí a las nueve de la mañana, ya son casi las dos de la tarde y ni la moto ni yo estamos listos. No me da nada de emoción el comienzo de esta aventurita, pero vamos a perseverar, como siempre lo hacemos.
Ya es tardísimo ¡COÑOOOO!
Ya tengo la ruta planeada y el GPS listo, con un hotelito reservado en un pueblo de Alsacia. Ahora es cosa de ponerme el ajuar, cargar la moto, y ¡vámonos! Así que poco menos de una hora después, ya estamos por partir.
Por fin... dos meses después, LISTOS!
continuará…
Esta vez tendré que ir solo por el calendario escolar de mi hijo, y afortunadamente hay asientos disponibles de sobra en el vuelo así que por ahora todo va en marcha, teniendo cuidado de avisar a BMW de mi llegada para que tengan la moto preparada.
Abril 21, 2017
Como siempre, voy con los nervios de costumbre cada vez que salgo a mis viajecitos, por dejar a la familia sola (que es puro neurotismo, pues Dubai es mucho muy seguro) y por tener que frenar a la imaginación por lo que pudiera pasar. Las cosas que piensa uno a veces.
Aunque suene simple, el proceso de irme a motear es arduo, y por ahora tengo la suerte de que solo necesito un vuelo para llegar a la moto, al contrario de otras veces, y como quiero aprovechar el tiempo lo más posible, he decidido tomar el vuelo que sale a las 3am para llegar a Munich temprano y utilizar el día al máximo. Otra desvelada más, pero no me importa en lo absoluto (en esas fechas aún tenía la energía para hacer esos circos, ahora ya no).
A estas horas el aeropuerto está vacío
El vuelo va casi lleno, pero alcancé asiento...
Y de los buenos!
Mariposas en el estómago por dejar a la familia. Como siempre.
El vuelo transcurrió sin problemas, al llegar a Munich tomé el tren regional a la ciudad y de ahí directo al conce a por la moto.
Hasta ese momento todo iba a pedir de boca y de acuerdo al plan maestro, lo cual cambió en un instante cuando me dicen que la moto no esta lista, pues están trabajando en ella… ¿QUE QUEEE?? Esto es de no creerse, han tenido un puto mes entero para trabajar en la moto (y arreglar su propia cagada) y ahora sucede que lo han dejado hasta el último día! Tengo la cara demudada del coraje, y aunque no acostumbro ponerme violento ese día sí me dió mucho gusto pegar de gritos y recordarles a estos imbéciles el porqué han perdido dos guerras mundiales.
Para colmo, no pueden montar los faros de nuevo porque al removerlos rompieron uno de los switches, y por supuesto que no tienen la pieza pues es parte del kit de los faros.
Les digo que me voy tal como tal, con los faros en la bolsa, pero exijo que me den por escrito algo donde se comprometen a cubrir el costo total de las piezas de repuesto y la mano de obra para reparar el daño, lo que hacen de inmediato y de buena manera.
Todo este drama me ha demorado mucho, llegué aquí a las nueve de la mañana, ya son casi las dos de la tarde y ni la moto ni yo estamos listos. No me da nada de emoción el comienzo de esta aventurita, pero vamos a perseverar, como siempre lo hacemos.
Ya es tardísimo ¡COÑOOOO!
Ya tengo la ruta planeada y el GPS listo, con un hotelito reservado en un pueblo de Alsacia. Ahora es cosa de ponerme el ajuar, cargar la moto, y ¡vámonos! Así que poco menos de una hora después, ya estamos por partir.
Por fin... dos meses después, LISTOS!
continuará…
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Pufff... difícil de digerir la experiencia con el taller. Por desgracia hace mucho que dejé de confiar en voluntades ajenas y sólo me fío de la mía y de mis recursos. Si tengo que depender de alguien para una cosa así lo hago a regañadientes y con muuuuuucho margen (y eso a veces tampoco es suficiente como hemos visto)...
Camellero
Curveando
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Así es Carolus, es tremendamente frustrante que hagan las cosas mal, especialmente cuando se trata de nada menos que el concesionario BMW en Munich mismo con quienes ya he tenido una larga y buena relación. Desgraciadamente al vivir lejos de la moto no me queda otra opción mas que delegar el mantenimiento a otros :_(
Camellero
Curveando
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Continuamos!...
Este, pues, es el Plan Maestro para este viajecito.
Con respecto a la ruta, la opción más directa es por Alsacia y después cruzando el Noreste de Francia en su totalidad, y aunque consideré irme por el área de Frankfurt, seguir el río Rin y cruzar Bélgica, me decidí por Alsacia pues nunca he estado en esa región y tengo ganas de visitar Verdun, con su museo de la primera guerra mundial.
La ruta de hoy
A los pocos minutos de salir tomo la Autobahn 8 en dirección Augsburg-Stuttgart, que me llevará directo a Alsacia. Inicialmente hago buen tiempo pero al pasar cerca de Ulm y en camino a Stuttgart, el tráfico se pone muy denso y al poco tiempo la Autobahn parece estacionamiento, con un congestionamiento horrendo. Por suerte los conductores son muy civilizados y la gran mayoría me da el paso, aunque a veces me tengo que insertar como supositorio entre los coches y camiones, la mayoría de los cuales me imagino se dirige hacia Frankfurt. El reloj sigue su marcha imparable y con cada minuto se me hace más tarde, pero ya los días son más largos y no me preocupa mucho que se me haga de noche. La moto va perfecta y aunque estoy algo cansado, la emoción de la moteada me mantiene alerta y en buen ánimo.
Breve parada en ruta, con el tráfico pesadísimo... para los enlatados!
Paso la ciudad de Pforzheim y giro a la izquierda para continuar en la A-5, ya en la región de Baden-Württemberg y pasando cerca de Heidelberg, donde comenzaron mis andanzas con la moto. Ya en Offenburg viro a la derecha para cruzar el Rin y entrar a Francia, y al hacer eso me pega el cansancio de lleno, afortunadamente me queda poco tiempo ya para llegar a mi destino, que es el pueblo de Kientzheim. Elegí este lugar porque la región tiene una interesante historia militar (SGM) y unos vinos buenísimos que no quiero dejar intactos.
La recta final, ¡literalmente!
La carretera es ya secundaria y con muchos semáforos e intersecciones, lo cual no me sienta nada bien con lo cansado que vengo. No es nada pintoresco y no se ve ni siquiera el río, pero justo cuando voy divagando en en esto llego a mi destino. El pueblito es muy tranquilo y pintoresco, y el hotelito Schwendi es fácil de encontrar. Tiene su propio parking y en cuestión de minutos estoy en mi habitación preparándome para bajar al restaurant, que se especializa en la comida de la región y platillos típicos Alsacianos.
Por fin llegamos, tanto el hotel como el pueblito me reciben bien
La cerveza de rigor para relajar los hombros, seguida de caracoles panteoneros con vino de la región
No recuerdo el nombre del platillo, pero estuvo delicioso. Y la moto, a dormir segura en el parking del hotel.
Después de una cena exquisita, caigo a dormir como si tuviera la conciencia limpia, lo que es bueno pues mañana será un día largo pero que disfrutaremos al máximo.
Este, pues, es el Plan Maestro para este viajecito.
Con respecto a la ruta, la opción más directa es por Alsacia y después cruzando el Noreste de Francia en su totalidad, y aunque consideré irme por el área de Frankfurt, seguir el río Rin y cruzar Bélgica, me decidí por Alsacia pues nunca he estado en esa región y tengo ganas de visitar Verdun, con su museo de la primera guerra mundial.
La ruta de hoy
A los pocos minutos de salir tomo la Autobahn 8 en dirección Augsburg-Stuttgart, que me llevará directo a Alsacia. Inicialmente hago buen tiempo pero al pasar cerca de Ulm y en camino a Stuttgart, el tráfico se pone muy denso y al poco tiempo la Autobahn parece estacionamiento, con un congestionamiento horrendo. Por suerte los conductores son muy civilizados y la gran mayoría me da el paso, aunque a veces me tengo que insertar como supositorio entre los coches y camiones, la mayoría de los cuales me imagino se dirige hacia Frankfurt. El reloj sigue su marcha imparable y con cada minuto se me hace más tarde, pero ya los días son más largos y no me preocupa mucho que se me haga de noche. La moto va perfecta y aunque estoy algo cansado, la emoción de la moteada me mantiene alerta y en buen ánimo.
Breve parada en ruta, con el tráfico pesadísimo... para los enlatados!
Paso la ciudad de Pforzheim y giro a la izquierda para continuar en la A-5, ya en la región de Baden-Württemberg y pasando cerca de Heidelberg, donde comenzaron mis andanzas con la moto. Ya en Offenburg viro a la derecha para cruzar el Rin y entrar a Francia, y al hacer eso me pega el cansancio de lleno, afortunadamente me queda poco tiempo ya para llegar a mi destino, que es el pueblo de Kientzheim. Elegí este lugar porque la región tiene una interesante historia militar (SGM) y unos vinos buenísimos que no quiero dejar intactos.
La recta final, ¡literalmente!
La carretera es ya secundaria y con muchos semáforos e intersecciones, lo cual no me sienta nada bien con lo cansado que vengo. No es nada pintoresco y no se ve ni siquiera el río, pero justo cuando voy divagando en en esto llego a mi destino. El pueblito es muy tranquilo y pintoresco, y el hotelito Schwendi es fácil de encontrar. Tiene su propio parking y en cuestión de minutos estoy en mi habitación preparándome para bajar al restaurant, que se especializa en la comida de la región y platillos típicos Alsacianos.
Por fin llegamos, tanto el hotel como el pueblito me reciben bien
La cerveza de rigor para relajar los hombros, seguida de caracoles panteoneros con vino de la región
No recuerdo el nombre del platillo, pero estuvo delicioso. Y la moto, a dormir segura en el parking del hotel.
Después de una cena exquisita, caigo a dormir como si tuviera la conciencia limpia, lo que es bueno pues mañana será un día largo pero que disfrutaremos al máximo.
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Camellero
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Viajar es un arte, la gastronomía una de sus asignaturas y tú sí que sabes cómo cuidarte...
Jajaja gracias Carolus, cuando se puede se puede, aunque de los bocadillos de gasolinera y las horas de ayuno en la moto no me escapo!
Camellero
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Abril 22, 2017
Uno de los beneficios más grandes de estos viajecitos en la moto es lo bien que duermo después de los días tan exhaustivos, y esta vez no fue la excepción. La habitación es modesta pero muy cómoda, y la cama por igual. Como de costumbre hoy me levanto muy temprano (4am) y eso me da tiempo para llevarla tranquilo, ver el mapa con tranquilidad y estudiar la ruta. Otra de las ventajas de levantarse a esa hora es que siempre soy el primero en llegar al desayuno y tengo el lugar para mi solito, aunque hoy decido salir a caminar un poco antes de darme el atracón de costumbre.
Alsacia tiene una historia complicada, habiendo pasado de manos en más de un par de ocasiones entre alemanes y franceses. Como decía anteriormente, uno de los motivos para venir a esta área es la historia militar del lugar, pues en estos lugares hubo batallas muy encarnizadas entre los alemanes y americanos, los primeros ocupando Alsacia y los segundos en camino al rio Rin, con el objetivo de entrar a Alemania. Encontré un buen sitio donde hay interesantes anécdotas y descripción de las batallas en el área, y se puede leer aquí.
Es una experiencia el caminar las calles del pueblito en absoluta calma y tranquilidad, y casi imposible visualizar la brutalidad de la violencia que aquí sucedió. Dejemos que las fotos lo digan…
Kientzheim entonces y ahora...
Esta es la imagen completa de la foto anterior, a la derecha esta la misma casa hoy en día
Esta es la calle entre las dos casas, donde se ve el jeep estacionado en la foto antigua
Vistas del pueblo, a plenas Pascuas
Después de la caminata es hora de disfrutar el excelente desayuno, que está muy completo e incluye de nuevo especialidades de la región. A pesar de las apariencias, suelo no comer mucho cuando hago estos viajes pues no me gusta sentirme muy lleno cuando ando en la moto.
En poco tiempo me alisto y es hora de continuar la jornada. Las primeras horas hasta Verdun son en carreteras secundarias casi en su totalidad, comenzando por una parte de los Vosgos y después ya el area de Verdun, aunque no hice fotos ya en Alsacia porque hay muchas curvas y pocos lugares para detenerse. En esta primera mitad del trayecto no planée tocar autopista, aunque me tome un poco más de tiempo. Y así, dejamos Kientzheim con destino a Verdun para ver el Museo Memorial de Verdun, y de ahí acercarnos lo más posible a Calais.
El plan de hoy, primera mitad
Uno de los beneficios más grandes de estos viajecitos en la moto es lo bien que duermo después de los días tan exhaustivos, y esta vez no fue la excepción. La habitación es modesta pero muy cómoda, y la cama por igual. Como de costumbre hoy me levanto muy temprano (4am) y eso me da tiempo para llevarla tranquilo, ver el mapa con tranquilidad y estudiar la ruta. Otra de las ventajas de levantarse a esa hora es que siempre soy el primero en llegar al desayuno y tengo el lugar para mi solito, aunque hoy decido salir a caminar un poco antes de darme el atracón de costumbre.
Alsacia tiene una historia complicada, habiendo pasado de manos en más de un par de ocasiones entre alemanes y franceses. Como decía anteriormente, uno de los motivos para venir a esta área es la historia militar del lugar, pues en estos lugares hubo batallas muy encarnizadas entre los alemanes y americanos, los primeros ocupando Alsacia y los segundos en camino al rio Rin, con el objetivo de entrar a Alemania. Encontré un buen sitio donde hay interesantes anécdotas y descripción de las batallas en el área, y se puede leer aquí.
Es una experiencia el caminar las calles del pueblito en absoluta calma y tranquilidad, y casi imposible visualizar la brutalidad de la violencia que aquí sucedió. Dejemos que las fotos lo digan…
Kientzheim entonces y ahora...
Esta es la imagen completa de la foto anterior, a la derecha esta la misma casa hoy en día
Esta es la calle entre las dos casas, donde se ve el jeep estacionado en la foto antigua
Vistas del pueblo, a plenas Pascuas
Después de la caminata es hora de disfrutar el excelente desayuno, que está muy completo e incluye de nuevo especialidades de la región. A pesar de las apariencias, suelo no comer mucho cuando hago estos viajes pues no me gusta sentirme muy lleno cuando ando en la moto.
En poco tiempo me alisto y es hora de continuar la jornada. Las primeras horas hasta Verdun son en carreteras secundarias casi en su totalidad, comenzando por una parte de los Vosgos y después ya el area de Verdun, aunque no hice fotos ya en Alsacia porque hay muchas curvas y pocos lugares para detenerse. En esta primera mitad del trayecto no planée tocar autopista, aunque me tome un poco más de tiempo. Y así, dejamos Kientzheim con destino a Verdun para ver el Museo Memorial de Verdun, y de ahí acercarnos lo más posible a Calais.
El plan de hoy, primera mitad
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Camellero
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El viaje al Memorial de Verdún fue genial, solamente por carretera nacional y comarcales. El clima ayudó muchísimo pues a pesar de que estaba algo frío, alrededor de los cinco grados, estaba despejado y sin nada de lluvia. Rodeo la ciudad de Nancy para entrar al Parque Regional Natural de Lorraine, donde por accidente me encuentro con el cementerio Americano de St. Mihiel, que aunque se ve muy interesante lo tengo que dejar pasar sin visitar pues simplemente no tengo tiempo. Cerca de aquí hay también un cementerio Alemán, a unos treinta kilómetros. En el instante que llego al cementerio, el cielo se encapota y comienza la llovizna.
En cuestión de minutos, la llovizna
La llovizna es mucho muy ligera y no me impide seguir el camino así que en menos de una hora estoy entrando a la ciudad (más bien pueblo), que se ve bastante triste y sin nada de atractivo. El Museo se encuentra en lo que fue el epicentro de la batalla más larga de la primera guerra mundial, con centenares de miles de bajas. La historia de la batalla se puede ver aquí.
El museo es verdaderamente interesante y mucho muy bien diseñado, pasé un par de horas ahí y es verdaderamente conmovedor. De la Primera Guerra Mundial nunca he leído mucho así que la visita fue genial.
Ya terminada la visita al museo, me como un bocadillo ahí mismo y me preparo para continuar. Cuando llegué la lluvia estaba apretando un poco pero ya no hay más, y espero que así siga para poder hacer buen tiempo. Como no tengo el resto de la ruta definido no he hecho reserva en ningún lugar, siendo el objetivo acercarme lo más posible al Paso de Calais, si no es que a Calais mismo.
Ya en camino de vuelta hacia el pueblo para tomar la Autoroute, me pasa por el cerebrito la idea de dar hacia el norte por carretera secundaria y pasar por Sedan, muy tentador, así que me detengo y lo consulto con el GPS... con la novedad de que eso añadiría más de una hora al viaje. A ver, a echar números: Ya pasan de las 4pm y siento ya el cansancio, así que sería una soberana idiotez a menos que pasara la noche por esa región o más hacia el oeste en Cambrai, lo cual me demoraría mucho pues tengo que cruzar hacia Inglaterra mañana antes de mediodía. Como ya he aprendido, los números no mienten, así que desisto de la tentación y continúo hacia la A4 para intentar recuperar tiempo.
Por suerte traigo muy buena música en el móvil, así que las horas de autopista me aburrirán menos. Cojo la A4 hasta Reims, capital del Champán, donde soy prácticamente el único vehículo circulando, y de ahi la A26 al noroeste en dirección Arras-Calais. Como siempre, ha subestimado lo largo del viaje y sobreestimado mi propio aguante, así que a las dos horas y media de camino y voy exhausto, no he comido y me quedan como máximo unos 90 minutos de luz. Me detengo en un par de ocasiones para buscar alojamiento con el móvil pero no hay señal... esto por supuesto que solamente me sucede a mí cuando tengo la urgencia. Si se tratara de recibir mensajes del banco o alguna otra tontería, seguro que iba a servir. No me queda otra opción más que seguir de frente, a ver si en Bethune encuentro algo, pero ahí me sucede exactamente lo mismo y no tengo señal, ya el sol se ha puesto y está enfriando más, seguro que el hambre y el cansancio no ayudan. En ese momento me recuerdo haber visto una casa de huéspedes ayer en el móvil, así que seguro está guardado en la memoria, y la encuentro de inmediato, pero como no tengo señal no puedo llamarles para ver si tienen habitaciones disponibles. No me queda de otra más que jugármela e irme directamente a la casa. Por suerte el GPS funciona de maravilla a pesar de que está muy nublado, pues eso a veces me ha interferido con la señal.
Media hora después, llego a la Chambres d'hôtes Les Cohettes, donde después de unos minutos de terror porque nadie abría la puerta, al llamar por teléfono me recibe Fanny y me da la mejor habitación. Como no tienen restaurante y vengo medio muerto de hambre, su esposo (de cuyo nombre no me acuerdo) muy amablemente me lleva en su coche a comprar un sandwich de esos de carrito que simplemente me sabe a gloria, acompañado de un par de Stella Artois que me llevan directo al Nirvana.
Así termina un largo pero excelente día que he disfrutado muchísimo y sin ningún susto o contratiempo. Antes de dormir compro el billete para el Eurotúnel, y como de andar a las carreras hoy tuve de sobra, compro el billete caro que me permite llegar a la hora que se me pegue la gana y subirme al primer tren que haya. No tengo tiempo para desperdiciar con los ferries, así que por tren será.
El parking de Les Cohettes
Mi salvador junto al señor Chef
El manjar de esta noche
En éxtasis total. No hay palabras.
La jornadita de hoy: 579 kms en 6:40 horas sin contar paradas
En cuestión de minutos, la llovizna
La llovizna es mucho muy ligera y no me impide seguir el camino así que en menos de una hora estoy entrando a la ciudad (más bien pueblo), que se ve bastante triste y sin nada de atractivo. El Museo se encuentra en lo que fue el epicentro de la batalla más larga de la primera guerra mundial, con centenares de miles de bajas. La historia de la batalla se puede ver aquí.
El museo es verdaderamente interesante y mucho muy bien diseñado, pasé un par de horas ahí y es verdaderamente conmovedor. De la Primera Guerra Mundial nunca he leído mucho así que la visita fue genial.
Ya terminada la visita al museo, me como un bocadillo ahí mismo y me preparo para continuar. Cuando llegué la lluvia estaba apretando un poco pero ya no hay más, y espero que así siga para poder hacer buen tiempo. Como no tengo el resto de la ruta definido no he hecho reserva en ningún lugar, siendo el objetivo acercarme lo más posible al Paso de Calais, si no es que a Calais mismo.
Ya en camino de vuelta hacia el pueblo para tomar la Autoroute, me pasa por el cerebrito la idea de dar hacia el norte por carretera secundaria y pasar por Sedan, muy tentador, así que me detengo y lo consulto con el GPS... con la novedad de que eso añadiría más de una hora al viaje. A ver, a echar números: Ya pasan de las 4pm y siento ya el cansancio, así que sería una soberana idiotez a menos que pasara la noche por esa región o más hacia el oeste en Cambrai, lo cual me demoraría mucho pues tengo que cruzar hacia Inglaterra mañana antes de mediodía. Como ya he aprendido, los números no mienten, así que desisto de la tentación y continúo hacia la A4 para intentar recuperar tiempo.
Por suerte traigo muy buena música en el móvil, así que las horas de autopista me aburrirán menos. Cojo la A4 hasta Reims, capital del Champán, donde soy prácticamente el único vehículo circulando, y de ahi la A26 al noroeste en dirección Arras-Calais. Como siempre, ha subestimado lo largo del viaje y sobreestimado mi propio aguante, así que a las dos horas y media de camino y voy exhausto, no he comido y me quedan como máximo unos 90 minutos de luz. Me detengo en un par de ocasiones para buscar alojamiento con el móvil pero no hay señal... esto por supuesto que solamente me sucede a mí cuando tengo la urgencia. Si se tratara de recibir mensajes del banco o alguna otra tontería, seguro que iba a servir. No me queda otra opción más que seguir de frente, a ver si en Bethune encuentro algo, pero ahí me sucede exactamente lo mismo y no tengo señal, ya el sol se ha puesto y está enfriando más, seguro que el hambre y el cansancio no ayudan. En ese momento me recuerdo haber visto una casa de huéspedes ayer en el móvil, así que seguro está guardado en la memoria, y la encuentro de inmediato, pero como no tengo señal no puedo llamarles para ver si tienen habitaciones disponibles. No me queda de otra más que jugármela e irme directamente a la casa. Por suerte el GPS funciona de maravilla a pesar de que está muy nublado, pues eso a veces me ha interferido con la señal.
Media hora después, llego a la Chambres d'hôtes Les Cohettes, donde después de unos minutos de terror porque nadie abría la puerta, al llamar por teléfono me recibe Fanny y me da la mejor habitación. Como no tienen restaurante y vengo medio muerto de hambre, su esposo (de cuyo nombre no me acuerdo) muy amablemente me lleva en su coche a comprar un sandwich de esos de carrito que simplemente me sabe a gloria, acompañado de un par de Stella Artois que me llevan directo al Nirvana.
Así termina un largo pero excelente día que he disfrutado muchísimo y sin ningún susto o contratiempo. Antes de dormir compro el billete para el Eurotúnel, y como de andar a las carreras hoy tuve de sobra, compro el billete caro que me permite llegar a la hora que se me pegue la gana y subirme al primer tren que haya. No tengo tiempo para desperdiciar con los ferries, así que por tren será.
El parking de Les Cohettes
Mi salvador junto al señor Chef
El manjar de esta noche
En éxtasis total. No hay palabras.
La jornadita de hoy: 579 kms en 6:40 horas sin contar paradas
Viajazo Kiko, como siempre bien narrado tanto escrito como de manera gráfica.
Respecto al contratiempo en Munich con la moto la verdad es que sorprende, se presupone que siendo cuna de la marca debe haber especial cuidado en absolutamente todo pero como bien dices el factor humano es lo que más cuenta y en este caso afectándote a ti principalmente.
Buen viaje amigo, disfruta de todo, de la moto, de las comidas, paisajes y de esas cervezas regeneradoras.
Abrazo.
Respecto al contratiempo en Munich con la moto la verdad es que sorprende, se presupone que siendo cuna de la marca debe haber especial cuidado en absolutamente todo pero como bien dices el factor humano es lo que más cuenta y en este caso afectándote a ti principalmente.
Buen viaje amigo, disfruta de todo, de la moto, de las comidas, paisajes y de esas cervezas regeneradoras.
Abrazo.
Camellero
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Gracias Tarzán, a mí también me sorprendió que me hayan salido con esa clase de cosas, sobretodo al ya tener relación personal con ellos después de tanto tiempo de tener albergada la moto ahí con ellos. En fin, si algo he aprendido es que la idiotez anda rampante por el mundo y nadie se escapa de sus consecuencias.
Un abrazo!
Camellero
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Abril 23, 2017
Esta noche he dormido mejor que en mucho tiempo, y el descanso me ha sentado de maravilla después de la paliza de ayer. Como ya he mencionado, como no me sobra el tiempo he decidido cruzar a Inglaterra con el tren, y para eso he comprado en línea el billete Flexiplus que me permite llegar a la hora que quiera y tomar el primer tren que salga. La terminal del Eurotunnel en Calais me queda a escasos 45 minutos así que no llevo prisa.
Después de disfrutar el excelente desayuno que nos ha preparado Fanny, la dueña de la casa, preparo la moto y le damos marcha. El área donde se encuentra la casa es muy bonita y digna de otra visita con más tiempo, que es lo que nunca tengo. Ya será algún día.
Entre el GPS y las señales encuentro la terminal sin problema alguno, y todo está muy bien organizado. En la primera caseta me checan el billete, y después viene el control de pasaportes, donde no me dan ningún problema ni me piden documento alguno a excepción del pasaporte y las preguntas de rigor.
Hay un carril especial para los billetes Flexiplus evitando hacer cola alguna y simplemente me lleva directo al primer vagón disponible. Me guían directo al vagón y ya dentro avanzo un par de vagones más, aparcando junto a otra BMW con matrícula francesa.
Llegando a la terminal de "Le Shuttle" (Eurotunnel) Mi entrada al tren
La motorka muy cómoda en el vagón
Mi vecino admirando a la Motorka. Nótese la red de seguridad PacSafe que he puesto en la bolsa, para dar algo de tranquilidad al dejar la moto sola.
El trayecto dura solamente unos treinta y cinco minutos y es a baja velocidad. Como las motos no van sujetas con nada, en mi caso me pidieron que me quedara con la moto para sujetarla pues va muy pesada. El resto de los conductores sube al segundo piso donde hay asientos, sanitarios, y creo que hasta una cafetería.
A la llegada a la terminal de Folkestone (no Dover, como los ferries) la salida es nuevamente muy organizada y sin problema alguno, con acceso directo a la autopista M20 que te lleva directo a Londres.
Mi destino es un área suburbana al suroeste de la capital, cerca de una ciudad pequeña llamada Guilford. Por autopista llegaría en poco más de una hora y media, pero traigo tiempo suficiente para evitar la autopista y el tráfico de Londres, quisiera pasar por Hastings y quizás echarle un vistazo al campo donde se llevó a cabo la batalla del mismo nombre que dió nacimiento a la Inglaterra de hoy, aunque lo veo poco probable pues el sitio de la batalla está a unos 15 minutos al norte en un pueblo llamado muy adecuadamente "Battle".
Sigo los anuncios hacia el centro de Folkestone, y después de repostar combustible y comprar un bocadillo continúo por la A259 hacia Hastings, para continuar luego por la A27 a Brighton y A23/A272 hacia Guildford. La conducción por la izquierda no es mayor problema pues ya lo he hecho en varias ocasiones, pero no bajo la guardia porque es fácil distraerse y automáticamente volver al hábito de irse a la derecha, sobretodo en las rotondas, que aquí abundan.
El tiempo es fantástico y como es fin de semana veo bastantes motos y autos clásicos por la carretera, todo mundo pasándola bien y conduciendo de manera muy civilizada, lo que es fácil pues el límite de velocidad es bajo. Pocos minutos después de dejar Folkestone me encuentro con una joya llamada Oasis Cafe donde tomo un almuerzo simplemente maravilloso. Es una bienvenida excelente al Reino Unido.
A quien no le guste la comida Británica, quizás sea por no ordenar los platillos correctos
Después del festín, sigo el camino hacia Guildford con poco tráfico, excelente clima y la emoción de llegar en la moto a otro país, y aunque ya he estado en el Reino Unido en muchas ocasiones al andar en la moto todo tiene un matiz totalmente distinto. He decidido continuar siguiendo la costa pero después de un par de horas de pasar pueblitos y rotondas la verdad que me harté de los caminitos secundarios y me pasé a la autopista que va hacia Brighton, que es una ciudad un poco más grande e importante del área.
Llego finalmente a casa de mi amigo que va a hospedar mi moto por las próximas semanas, y como siempre traigo el tiempo muy medido, pero sí que me da tiempo para ir a por unas cervezas al pub de enfrente antes de ir a tomar el tren al aeropuerto de Londres-Gatwick, de donde volaré de vuelta a Dubai.
El tren es bastante bueno y barato, con un trayecto de exactamente una hora. Así termina otra etapa de esta jornada interminable, donde hacemos lo posible por recorrer lo más posible, tres días a la vez.
La moto en su nueva morada temporal Ya empacada la moto, ¡Vámonos al pub!
Típica escena de la campiña Inglesa, con su prado de Cricket Hoy tomamos el Southern Railway a Gatwick
Así como se ve la foto veía yo después de las Pintas de cerveza Inglesa, deliciosa A veces hay cena de Gourmet, y a veces solo hay cena
Y como postre... Ya en Dubai de vuelta a casa y a planear la siguiente etapa!
La ruta de hoy
Esta noche he dormido mejor que en mucho tiempo, y el descanso me ha sentado de maravilla después de la paliza de ayer. Como ya he mencionado, como no me sobra el tiempo he decidido cruzar a Inglaterra con el tren, y para eso he comprado en línea el billete Flexiplus que me permite llegar a la hora que quiera y tomar el primer tren que salga. La terminal del Eurotunnel en Calais me queda a escasos 45 minutos así que no llevo prisa.
Después de disfrutar el excelente desayuno que nos ha preparado Fanny, la dueña de la casa, preparo la moto y le damos marcha. El área donde se encuentra la casa es muy bonita y digna de otra visita con más tiempo, que es lo que nunca tengo. Ya será algún día.
Entre el GPS y las señales encuentro la terminal sin problema alguno, y todo está muy bien organizado. En la primera caseta me checan el billete, y después viene el control de pasaportes, donde no me dan ningún problema ni me piden documento alguno a excepción del pasaporte y las preguntas de rigor.
Hay un carril especial para los billetes Flexiplus evitando hacer cola alguna y simplemente me lleva directo al primer vagón disponible. Me guían directo al vagón y ya dentro avanzo un par de vagones más, aparcando junto a otra BMW con matrícula francesa.
Llegando a la terminal de "Le Shuttle" (Eurotunnel) Mi entrada al tren
La motorka muy cómoda en el vagón
Mi vecino admirando a la Motorka. Nótese la red de seguridad PacSafe que he puesto en la bolsa, para dar algo de tranquilidad al dejar la moto sola.
El trayecto dura solamente unos treinta y cinco minutos y es a baja velocidad. Como las motos no van sujetas con nada, en mi caso me pidieron que me quedara con la moto para sujetarla pues va muy pesada. El resto de los conductores sube al segundo piso donde hay asientos, sanitarios, y creo que hasta una cafetería.
A la llegada a la terminal de Folkestone (no Dover, como los ferries) la salida es nuevamente muy organizada y sin problema alguno, con acceso directo a la autopista M20 que te lleva directo a Londres.
Mi destino es un área suburbana al suroeste de la capital, cerca de una ciudad pequeña llamada Guilford. Por autopista llegaría en poco más de una hora y media, pero traigo tiempo suficiente para evitar la autopista y el tráfico de Londres, quisiera pasar por Hastings y quizás echarle un vistazo al campo donde se llevó a cabo la batalla del mismo nombre que dió nacimiento a la Inglaterra de hoy, aunque lo veo poco probable pues el sitio de la batalla está a unos 15 minutos al norte en un pueblo llamado muy adecuadamente "Battle".
Sigo los anuncios hacia el centro de Folkestone, y después de repostar combustible y comprar un bocadillo continúo por la A259 hacia Hastings, para continuar luego por la A27 a Brighton y A23/A272 hacia Guildford. La conducción por la izquierda no es mayor problema pues ya lo he hecho en varias ocasiones, pero no bajo la guardia porque es fácil distraerse y automáticamente volver al hábito de irse a la derecha, sobretodo en las rotondas, que aquí abundan.
El tiempo es fantástico y como es fin de semana veo bastantes motos y autos clásicos por la carretera, todo mundo pasándola bien y conduciendo de manera muy civilizada, lo que es fácil pues el límite de velocidad es bajo. Pocos minutos después de dejar Folkestone me encuentro con una joya llamada Oasis Cafe donde tomo un almuerzo simplemente maravilloso. Es una bienvenida excelente al Reino Unido.
A quien no le guste la comida Británica, quizás sea por no ordenar los platillos correctos
Después del festín, sigo el camino hacia Guildford con poco tráfico, excelente clima y la emoción de llegar en la moto a otro país, y aunque ya he estado en el Reino Unido en muchas ocasiones al andar en la moto todo tiene un matiz totalmente distinto. He decidido continuar siguiendo la costa pero después de un par de horas de pasar pueblitos y rotondas la verdad que me harté de los caminitos secundarios y me pasé a la autopista que va hacia Brighton, que es una ciudad un poco más grande e importante del área.
Llego finalmente a casa de mi amigo que va a hospedar mi moto por las próximas semanas, y como siempre traigo el tiempo muy medido, pero sí que me da tiempo para ir a por unas cervezas al pub de enfrente antes de ir a tomar el tren al aeropuerto de Londres-Gatwick, de donde volaré de vuelta a Dubai.
El tren es bastante bueno y barato, con un trayecto de exactamente una hora. Así termina otra etapa de esta jornada interminable, donde hacemos lo posible por recorrer lo más posible, tres días a la vez.
La moto en su nueva morada temporal Ya empacada la moto, ¡Vámonos al pub!
Típica escena de la campiña Inglesa, con su prado de Cricket Hoy tomamos el Southern Railway a Gatwick
Así como se ve la foto veía yo después de las Pintas de cerveza Inglesa, deliciosa A veces hay cena de Gourmet, y a veces solo hay cena
Y como postre... Ya en Dubai de vuelta a casa y a planear la siguiente etapa!
La ruta de hoy
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Camellero
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Mayo 12-13, 2017
Al siguiente mes de haber dejado la moto en Guildford conseguí regresar a Londres, esta vez trabajando, lo que me permitió trasladar la moto a un taller para re-instalar los faros que los Alemanes de BMW en Munich me hicieron el favor de arruinar, y de paso le harán servicio completo. Me encantaría poder meterle mano y aprender a mantener la moto yo mismo, pero por la distancia y la escasez de tiempo eso no pasará sino hasta que me retire.
Para esto, al llegar al aeropuerto de Heathrow tomé un taxi hacia Guildford, donde me hospedé en un magnífico pub llamado Jolly Farmer, que está simplemente maravilloso en todos aspectos, y tiene una gama de cervezas y Ales de primera clase.
Al día siguiente, un viajecito de diez minutos en autobús local me pone en casa de mi amigo, y de ahí partimos de vuelta hacia el aeropuerto de London Heathrow pues el taller está a escasos cinco minutos de ahí. El GPS me jugó una muy mala pasada y me llevó a un lugar cercano pero sí que me dí una perdida fenomenal, lo que me ocasionó ir contra reloj como siempre.
Por fin llego a Cooperized Dyno & Motorcycle Centre donde Tracy y compañía me reciben de maravilla y en pocos minutos me solucionan todos mis problemas existenciales.
Pocas horas después ahí vamos de vuelta al desierto, y como esta vez la narrativa es nula, dejemos que las fotos hablen. El siguiente reto será el conseguir los días libres para regresar y llevarnos la moto a Escocia!
Salimos a tiempo, para variar ( foto de archivo, aquí de hecho es Barcelona)
El humor Británico es seco pero genial
La habitación, excelente
Hoy cenamos cordero y con una buena dosis de Ale para pasarlo
La caseta telefónica que nunca falta en el Reino Unido
Desayuno Inglés completo. No apto para cardíacos.
Las cosas que ve uno en el camino... ("Quién se vino primero?")
Cooperized Dyno Moto Centre, imágen de Google Maps
Mis nuevos anfitriones
Ahi vamos de regreso, aquí a punto de tragarnos a un B737 como si fuera sardina!
El trayecto de hoy (sin las perdidas!)
Al siguiente mes de haber dejado la moto en Guildford conseguí regresar a Londres, esta vez trabajando, lo que me permitió trasladar la moto a un taller para re-instalar los faros que los Alemanes de BMW en Munich me hicieron el favor de arruinar, y de paso le harán servicio completo. Me encantaría poder meterle mano y aprender a mantener la moto yo mismo, pero por la distancia y la escasez de tiempo eso no pasará sino hasta que me retire.
Para esto, al llegar al aeropuerto de Heathrow tomé un taxi hacia Guildford, donde me hospedé en un magnífico pub llamado Jolly Farmer, que está simplemente maravilloso en todos aspectos, y tiene una gama de cervezas y Ales de primera clase.
Al día siguiente, un viajecito de diez minutos en autobús local me pone en casa de mi amigo, y de ahí partimos de vuelta hacia el aeropuerto de London Heathrow pues el taller está a escasos cinco minutos de ahí. El GPS me jugó una muy mala pasada y me llevó a un lugar cercano pero sí que me dí una perdida fenomenal, lo que me ocasionó ir contra reloj como siempre.
Por fin llego a Cooperized Dyno & Motorcycle Centre donde Tracy y compañía me reciben de maravilla y en pocos minutos me solucionan todos mis problemas existenciales.
Pocas horas después ahí vamos de vuelta al desierto, y como esta vez la narrativa es nula, dejemos que las fotos hablen. El siguiente reto será el conseguir los días libres para regresar y llevarnos la moto a Escocia!
Salimos a tiempo, para variar ( foto de archivo, aquí de hecho es Barcelona)
El humor Británico es seco pero genial
La habitación, excelente
Hoy cenamos cordero y con una buena dosis de Ale para pasarlo
La caseta telefónica que nunca falta en el Reino Unido
Desayuno Inglés completo. No apto para cardíacos.
Las cosas que ve uno en el camino... ("Quién se vino primero?")
Cooperized Dyno Moto Centre, imágen de Google Maps
Mis nuevos anfitriones
Ahi vamos de regreso, aquí a punto de tragarnos a un B737 como si fuera sardina!
El trayecto de hoy (sin las perdidas!)
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Parece que breve pero intenso. Esperemos que en esta ocasión Motorka reciba los mimos que se merece, que, me da la impresión que ahora sí habrá más suerte.
Gran mini viaje Kiko. Abrazo enorme para todos.
Saludos cordiales.
Gran mini viaje Kiko. Abrazo enorme para todos.
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Camellero
Curveando
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Junio 21, 2017
Ha surgido la oportunidad de regresar a continuar el viaje planeado a Escocia, pasando por la ciudad de Hull para visitar a un buen amigo que ahí vive. Hull se encuentra en la costa Este de Inglaterra, y me queda bien para dividir en dos el trayecto hasta Glasgow. He decidido ir a Glasgow para después visitar la costa oeste de Escocia, así que Edimburgo tendrá que esperar.
Para esto, tengo que volar al odiado aeropuerto de Heathrow lo que es mal comienzo para cualquier aventura. Los vuelos siempre van repletos y el aeropuerto en sí es una verdadera porquería, y esta vez no será la excepción. Me toca irme en Clase Sardina pero por suerte hasta enfrente del avión, así que el vuelo se va relativamente rápido. Al llegar, como siempre el control de inmigración y chequeo de pasaportes es una tortura psicológica por la tardanza y la cantidad de humanos que hay en la cola. Me tardo poco más de una hora en salir de allí.
Como el taller queda muy cerca, lo mejor es tomar un autobús público que me deja casi enfrente y ya de ahí me tardo poco en alistarme y salir de Londres, que como todas las ciudades grandes, me agobia e irrita sobremanera.
Antes de irme de aquí, le doy una visita rápida al castillo de Windsor, residencia oficial de la Reina (una de ellas), y la cantidad de gente que hay me motiva a irme de allí lo antes posible, pero no sin pasar a ver (desde fuera) el Eton College, alma mater de figuras importantísimas de la historia y Aristocracia Inglesa, desde 1440 que lo fundó el rey Enrique VI.
Tengo que repetirme mil veces que esto "vale la pena"
"Navegando entre la masa sudorosa"
Esperando el autobús
Por lo menos el taller sigue abierto
El Castillo de Windsor y la muchedumbre esperando entrar
El clima, precioso para darle a la moto
Los problemas en el área de Windsor no parecen ser económicos.
El Eton College, cuna de hombres ilustres... ¡por arriba de 50 mil Euros por año escolar!
Después de mi rápida visita al castillo de Windsor y a Eton College, salgo volando hacia Cottingham, que es un pueblo muy antiguo y ahora es parte del area metropolitana del puerto de Hull. Rodeo el norte de Londres por la M25 seguida por la A1 hacia el norte. Esta carretera tiene pinta de autopista en el mapa, pero en la realidad es simplemente una carretera amplia con bastante tráfico y una cantidad obscena de rotondas. No tiene nada de paisajes y muchos camiones, así que le dí muchas gracias a Dios por traer buena música en el casco. Paso la salida hacia el aeropuerto de London Luton (otra porquería de aeropuerto) y otra hacia Cambridge, que sí me hubiese gustado visitar pero simplemente no tengo tiempo... es imposible ver todo. Así paso una hora en ese suplicio de carretera hasta que por fin me salgo a la derecha para tomar la A16 para pasar por la pequeña ciudad y puerto de Boston, en el condado de Lincolnshire (los condados en Inglaterra son por hoy los departamentos administrativos, que más o menos coinciden con antiguos condados y reinos en existencia desde tiempos anteriores a la invasión Normanda). Fueron emigrantes de este Boston quienes en el siglo XVII dieron el mismo nombre al asentamiento en la colonia de Massachussetts, convirtiéndose en nuevo Boston en el puerto más importante de la misma y donde se dio inicio a la independencia de las colonias de las corona Británica en América. Es un pueblo agradable y pintoresco, muy pequeño y tranquilo, llego a la plaza central donde acaba de terminar un mercado semanal que ya están levantando, una pena pues me hubiera gustado parar a comer ahí. Desgraciadamente no tengo oportunidad de hacer fotos del puerto, pues no hay donde pararse, así que pondré un par de internet.
El mercado semanal de Boston, ya cerrado
La iglesia de St. Botolph, una de las más altas en Inglaterra
Escala técnica para repostar y engullir el típico sandwich motero de gasolinera
Después de pasar por Boston, la carretera es bastante bonita y pasa por lo que llaman Lincolnshire AONB una "Area de Belleza Natural" (especie de parque nacional), misma que me deja al borde del río Humber y su enorme puente, entrada al puerto de Hull. Ya cruzando el puente en cuestión de minutos llego a Cottingham, donde he reservado una habitación en una casita a través de Airbnb, que es muy cómoda y donde mi anfitriona Carole, me recibe muy amablemente.
Al poco rato estoy con mi amigo Tim disfrutando unas buenas cervezas en un pub local, y así llegamos a la mitad de mi jornada hacia la mítica Escocia, que no me aguanto las ganas de ver. Mañana nos espera una buena jornada hacia Glasgow.
Hemos llegado a Cottingham
El premio de la jornada, una deliciosa pinta de Ale Inglesa
La jornada de hoy
Ha surgido la oportunidad de regresar a continuar el viaje planeado a Escocia, pasando por la ciudad de Hull para visitar a un buen amigo que ahí vive. Hull se encuentra en la costa Este de Inglaterra, y me queda bien para dividir en dos el trayecto hasta Glasgow. He decidido ir a Glasgow para después visitar la costa oeste de Escocia, así que Edimburgo tendrá que esperar.
Para esto, tengo que volar al odiado aeropuerto de Heathrow lo que es mal comienzo para cualquier aventura. Los vuelos siempre van repletos y el aeropuerto en sí es una verdadera porquería, y esta vez no será la excepción. Me toca irme en Clase Sardina pero por suerte hasta enfrente del avión, así que el vuelo se va relativamente rápido. Al llegar, como siempre el control de inmigración y chequeo de pasaportes es una tortura psicológica por la tardanza y la cantidad de humanos que hay en la cola. Me tardo poco más de una hora en salir de allí.
Como el taller queda muy cerca, lo mejor es tomar un autobús público que me deja casi enfrente y ya de ahí me tardo poco en alistarme y salir de Londres, que como todas las ciudades grandes, me agobia e irrita sobremanera.
Antes de irme de aquí, le doy una visita rápida al castillo de Windsor, residencia oficial de la Reina (una de ellas), y la cantidad de gente que hay me motiva a irme de allí lo antes posible, pero no sin pasar a ver (desde fuera) el Eton College, alma mater de figuras importantísimas de la historia y Aristocracia Inglesa, desde 1440 que lo fundó el rey Enrique VI.
Tengo que repetirme mil veces que esto "vale la pena"
"Navegando entre la masa sudorosa"
Esperando el autobús
Por lo menos el taller sigue abierto
El Castillo de Windsor y la muchedumbre esperando entrar
El clima, precioso para darle a la moto
Los problemas en el área de Windsor no parecen ser económicos.
El Eton College, cuna de hombres ilustres... ¡por arriba de 50 mil Euros por año escolar!
Después de mi rápida visita al castillo de Windsor y a Eton College, salgo volando hacia Cottingham, que es un pueblo muy antiguo y ahora es parte del area metropolitana del puerto de Hull. Rodeo el norte de Londres por la M25 seguida por la A1 hacia el norte. Esta carretera tiene pinta de autopista en el mapa, pero en la realidad es simplemente una carretera amplia con bastante tráfico y una cantidad obscena de rotondas. No tiene nada de paisajes y muchos camiones, así que le dí muchas gracias a Dios por traer buena música en el casco. Paso la salida hacia el aeropuerto de London Luton (otra porquería de aeropuerto) y otra hacia Cambridge, que sí me hubiese gustado visitar pero simplemente no tengo tiempo... es imposible ver todo. Así paso una hora en ese suplicio de carretera hasta que por fin me salgo a la derecha para tomar la A16 para pasar por la pequeña ciudad y puerto de Boston, en el condado de Lincolnshire (los condados en Inglaterra son por hoy los departamentos administrativos, que más o menos coinciden con antiguos condados y reinos en existencia desde tiempos anteriores a la invasión Normanda). Fueron emigrantes de este Boston quienes en el siglo XVII dieron el mismo nombre al asentamiento en la colonia de Massachussetts, convirtiéndose en nuevo Boston en el puerto más importante de la misma y donde se dio inicio a la independencia de las colonias de las corona Británica en América. Es un pueblo agradable y pintoresco, muy pequeño y tranquilo, llego a la plaza central donde acaba de terminar un mercado semanal que ya están levantando, una pena pues me hubiera gustado parar a comer ahí. Desgraciadamente no tengo oportunidad de hacer fotos del puerto, pues no hay donde pararse, así que pondré un par de internet.
El mercado semanal de Boston, ya cerrado
La iglesia de St. Botolph, una de las más altas en Inglaterra
Escala técnica para repostar y engullir el típico sandwich motero de gasolinera
Después de pasar por Boston, la carretera es bastante bonita y pasa por lo que llaman Lincolnshire AONB una "Area de Belleza Natural" (especie de parque nacional), misma que me deja al borde del río Humber y su enorme puente, entrada al puerto de Hull. Ya cruzando el puente en cuestión de minutos llego a Cottingham, donde he reservado una habitación en una casita a través de Airbnb, que es muy cómoda y donde mi anfitriona Carole, me recibe muy amablemente.
Al poco rato estoy con mi amigo Tim disfrutando unas buenas cervezas en un pub local, y así llegamos a la mitad de mi jornada hacia la mítica Escocia, que no me aguanto las ganas de ver. Mañana nos espera una buena jornada hacia Glasgow.
Hemos llegado a Cottingham
El premio de la jornada, una deliciosa pinta de Ale Inglesa
La jornada de hoy
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Camellero
Curveando
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Junio 22, 2017
Después de dormir como los que no deben nada, disfruto de un agradable desayuno con Carole. Ella es una señora ya mayor que vive sola y alquila una de sus habitaciones por medio de airbnb, es sumamente amable y la conversación es tan amena que se nos pasa el tiempo y el pobre desayuno queda carbonizado. En fin, se remedia pronto la tragedia y poco después de atracarme con un buen desayuno Inglés completo (de medio millón de calorías) me pongo en marcha hacia el noroeste, rumbo a la ciudad de York.
Desayuno de Reyes
Nuevamente la carretera no ofrece mucho entretenimiento, y llego pronto al area de York que me da muchísimo gusto rodear. Llego a la A1(M) - que por coincidencia es la autopista que me sacó del área de Londres - y al cabo de una hora o por ahí llego a la A66, una autopista nueva que corre de Este-Oeste y une la A1 con la M6, bordeando la parte sur de los montes Peninos (North Pennines AONB), y que es una verdadera joya por más de una razón, hay muy poco tráfico, está en perfecto estado y tiene unas vistas espectaculares.
Pocas fotos del camino porque no hay casi donde parar. Esta es la A66.
La A66 termina en la ciudad de Penrith, que no tiene ningún atractivo. A partir de ahí, más autopista hacia el norte que ahora se llama M74 y va directo a Glasgow, pasando por la ciudad de Lockerbie, ciudad muy antigua y con historia pero hecha famosa en 1988 tras el atentado terrorista que derribó un B747 de PanAm.
Por fin, después de más de cuatro horas llego al área metropolitana de Glasgow. He reservado un contenedor en el Paisley Self-Storage, a un paso del aeropuerto. Llego sin problemas al Self-Storage (bodega de depósito o algo así, que no sé como traducirlo al Castellano!) y me reciben de maravilla, y después de hacer trámites mínimos, meto a la Motorka a su nueva casa. He alquilado un contenedor completo así que me sobra el espacio para la moto y las maletas. Me cambio ahí mismo y me piden un taxi para el aeropuerto, que me queda a cinco minutos. Ha sido un muy buen viaje sin ningún contratiempo y con la oportunidad de ver amigos y hacer otros nuevos, ahora con un poco de suerte podré regresar a Escocia a aprovechar el verano antes de que esto se ponga gélido.
Mi recepción en Paisley
Los contenedores están en excelente estado y con muy buena seguridad
Nos ha tocado el G035
A descansar!
El viajecito de hoy
Después de dormir como los que no deben nada, disfruto de un agradable desayuno con Carole. Ella es una señora ya mayor que vive sola y alquila una de sus habitaciones por medio de airbnb, es sumamente amable y la conversación es tan amena que se nos pasa el tiempo y el pobre desayuno queda carbonizado. En fin, se remedia pronto la tragedia y poco después de atracarme con un buen desayuno Inglés completo (de medio millón de calorías) me pongo en marcha hacia el noroeste, rumbo a la ciudad de York.
Desayuno de Reyes
Nuevamente la carretera no ofrece mucho entretenimiento, y llego pronto al area de York que me da muchísimo gusto rodear. Llego a la A1(M) - que por coincidencia es la autopista que me sacó del área de Londres - y al cabo de una hora o por ahí llego a la A66, una autopista nueva que corre de Este-Oeste y une la A1 con la M6, bordeando la parte sur de los montes Peninos (North Pennines AONB), y que es una verdadera joya por más de una razón, hay muy poco tráfico, está en perfecto estado y tiene unas vistas espectaculares.
Pocas fotos del camino porque no hay casi donde parar. Esta es la A66.
La A66 termina en la ciudad de Penrith, que no tiene ningún atractivo. A partir de ahí, más autopista hacia el norte que ahora se llama M74 y va directo a Glasgow, pasando por la ciudad de Lockerbie, ciudad muy antigua y con historia pero hecha famosa en 1988 tras el atentado terrorista que derribó un B747 de PanAm.
Por fin, después de más de cuatro horas llego al área metropolitana de Glasgow. He reservado un contenedor en el Paisley Self-Storage, a un paso del aeropuerto. Llego sin problemas al Self-Storage (bodega de depósito o algo así, que no sé como traducirlo al Castellano!) y me reciben de maravilla, y después de hacer trámites mínimos, meto a la Motorka a su nueva casa. He alquilado un contenedor completo así que me sobra el espacio para la moto y las maletas. Me cambio ahí mismo y me piden un taxi para el aeropuerto, que me queda a cinco minutos. Ha sido un muy buen viaje sin ningún contratiempo y con la oportunidad de ver amigos y hacer otros nuevos, ahora con un poco de suerte podré regresar a Escocia a aprovechar el verano antes de que esto se ponga gélido.
Mi recepción en Paisley
Los contenedores están en excelente estado y con muy buena seguridad
Nos ha tocado el G035
A descansar!
El viajecito de hoy
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Espero Kiko que el contenedor no viaje súbitamente a un lugar desconocido y a la vuelta la Motorka no se encuentre donde la dejaste, te obligaría a viajar buscándola por medio mundo ?, lo cual sería una excusa maravillosa para hacerlo ?.
Otro viaje bien merecido y disfrutado.
Abrazo grande para toda la family.
Saludos cordiales.
Otro viaje bien merecido y disfrutado.
Abrazo grande para toda la family.
Saludos cordiales.
Camellero
Curveando
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Julio 16, 2017
He tenido suerte y solo el mes siguiente se me presenta la oportunidad de ir de nuevo a darle a la moto, me encuentro en la Rep. Checa con la familia así que tendré que volar desde allá. Aparte de irme por tierra a Praga o Viena y salir de ahí, tengo la opción de salir desde Brno (la segunda ciudad más grande de Chequia y donde se lleva a cabo el GP) a Londres - Stansted (otra mierda de aeropuerto, como todos en el Reino Unido). Como ya no podré conectar, tendré que pasar la noche ahí y volar temprano al día siguiente a Glasgow. Todo esto disfrutando de la hospitalidad de Ryanair, que no es exactamente el concepto ideal de comodidad, pero mientras me lleven, no me importa. Son increíbles los circos que tengo que hacer para poder pegarle a la moto!
Me lleva mi cuñado al aeropuerto de Brno-Turány y después de los dramas que con llevan viajar con Ryanair con el asunto de documentarse, verificar pasaporte, etc. me dispongo a salir. Hay una cola gigantesca para pasar el control de pasaportes, y por supuesto que solo hay un agente sellando los pasaportes de todo el puto avión, que va repleto, y apenas logro pasar a tiempo para abordar. Qué ironía, que con tantas causas de fuerza mayor que existen para perder un vuelo casi me quedo en tierra por culpa de un haragán que no le interesa hacer su trabajo con eficiencia.
Soy literalmente el último en abordar! - Hoy toca volar Clase Sardina.
Después de un vuelo más agradable de lo esperado, llegamos a London- Stansted, que nuevamente me brinda la oportunidad de hacer cola por más de media hora para pasar por el control de migración. Verdaderamente que es odioso volar al Reino Unido, si no tanto trabajando, definitivamente de pasajero. Como ya es algo tarde, me hospedo en el Radisson Blu en el aeropuerto mismo, que está bastante bueno. Como en muchas otras ocasiones, no duermo bien por la emoción de regresar a la moto!
Julio 17, 2017
Al día siguiente tengo que pasar por los mismos dramas con Ryanair, con verificación de pasaporte durante la facturación. Me imagino que es por ser pasaporte no Europeo, pero es una verdadera monserga. Esta vez, el vuelo no va tan lleno y es bastante más corto que ayer.
Hoy abordamos como la gente decente: A tiempo.
El vuelo llega a tiempo, y en cuestión de minutos voy en mi taxi al Self-Storage donde dejé la moto hace apenas un mes y que está muy cercano al aeropuerto. Todo está intacto y exactamente como lo dejé, y aunque la humedad en el contenedor es más alta de lo que me gustaría, no hay nada anormal. Ahora, a prepararse e irse!
Todo intacto, y con café fresco.
Me alisto en cuestión de minutos y salgo rumbo al Oeste, voy a tomar un ferry hacia Dunoon y recorrer la parte Oeste de esta área, en vez de ir directo al norte. El clima está sensacional, y sería un pecado usar el tiempo en la autopista! Este, pues, es el plan.
Esperando el ferry para cruzar de Gourock a Dunoon (sin darme cuenta que se había caído la parte derecha del LED del Top Case)
El clima (y la fauna local) muy atractivos
El trayecto fue simplemente fenomenal, casi nada de tráfico y las carreteras prácticamente para mí solo, lo que se me hizo un poco raro pues era durante las vacaciones de verano a plena temporada turística, aunque ya me habré de encontrar los dichosos autobuses por otras partes.
A la hora de rodear el Loch Fyne camino Inveraray, me tropiezo con el restaurant de mariscos Loch Fyne Oysters, y con mucho gusto me paro a engullir una buena comida de mariscos. Ese es el restaurant original de lo que ya es una cadena de restaurantes, fundado por un emprendedor local y su socio, un biólogo marino, pioneros de las "granjas" de ostras en el mismo Lago ("Loch" en Escocés/Gálico). Como me tomo mi tiempo para comer, ya no me dará tiempo para visitar el famoso castillo de Inveraray, lo cual no me molesta pues de visitar castillos, palacios y cosas de esas ya me quedan pocas ganas. Paso de largo del castillo - sin hacer fotos porque no tuve donde detenerme - y continúo hacia mi alojamiento en Onich, poco antes de llegar a Fort William, ciudad que sirve de base a muchos visitantes.
La carretera solita para mí
Rodeando el Loch Fyne
Y me encuentro con esta joyita...
El lugar, muy agradable
Pues habrá que probar el producto local
Llego sin contratiempos a la casa "Tigh Marall" que he reservado en airbnb, donde me esperan ya Margaret y Michael, una pareja Escocesa que me reciben como si me conocieran de toda la vida. Su casa es preciosa y con una vista espectacular.
"Tigh Marall", en Onich
La vista desde mi ventana. He visto peores.
La habitación, comodísima
Así llegamos al final de un día muy largo como de costumbre, pero memorable en todos aspectos. Me doy cuenta que estoy rendido pero es el cansancio del bueno, después de un día activo y relajado. Para mañana no hay plan, ya se nos ocurrirá algo.
La jornada de hoy (sin incluir el vuelo desde Stansted!)
He tenido suerte y solo el mes siguiente se me presenta la oportunidad de ir de nuevo a darle a la moto, me encuentro en la Rep. Checa con la familia así que tendré que volar desde allá. Aparte de irme por tierra a Praga o Viena y salir de ahí, tengo la opción de salir desde Brno (la segunda ciudad más grande de Chequia y donde se lleva a cabo el GP) a Londres - Stansted (otra mierda de aeropuerto, como todos en el Reino Unido). Como ya no podré conectar, tendré que pasar la noche ahí y volar temprano al día siguiente a Glasgow. Todo esto disfrutando de la hospitalidad de Ryanair, que no es exactamente el concepto ideal de comodidad, pero mientras me lleven, no me importa. Son increíbles los circos que tengo que hacer para poder pegarle a la moto!
Me lleva mi cuñado al aeropuerto de Brno-Turány y después de los dramas que con llevan viajar con Ryanair con el asunto de documentarse, verificar pasaporte, etc. me dispongo a salir. Hay una cola gigantesca para pasar el control de pasaportes, y por supuesto que solo hay un agente sellando los pasaportes de todo el puto avión, que va repleto, y apenas logro pasar a tiempo para abordar. Qué ironía, que con tantas causas de fuerza mayor que existen para perder un vuelo casi me quedo en tierra por culpa de un haragán que no le interesa hacer su trabajo con eficiencia.
Soy literalmente el último en abordar! - Hoy toca volar Clase Sardina.
Después de un vuelo más agradable de lo esperado, llegamos a London- Stansted, que nuevamente me brinda la oportunidad de hacer cola por más de media hora para pasar por el control de migración. Verdaderamente que es odioso volar al Reino Unido, si no tanto trabajando, definitivamente de pasajero. Como ya es algo tarde, me hospedo en el Radisson Blu en el aeropuerto mismo, que está bastante bueno. Como en muchas otras ocasiones, no duermo bien por la emoción de regresar a la moto!
Julio 17, 2017
Al día siguiente tengo que pasar por los mismos dramas con Ryanair, con verificación de pasaporte durante la facturación. Me imagino que es por ser pasaporte no Europeo, pero es una verdadera monserga. Esta vez, el vuelo no va tan lleno y es bastante más corto que ayer.
Hoy abordamos como la gente decente: A tiempo.
El vuelo llega a tiempo, y en cuestión de minutos voy en mi taxi al Self-Storage donde dejé la moto hace apenas un mes y que está muy cercano al aeropuerto. Todo está intacto y exactamente como lo dejé, y aunque la humedad en el contenedor es más alta de lo que me gustaría, no hay nada anormal. Ahora, a prepararse e irse!
Todo intacto, y con café fresco.
Me alisto en cuestión de minutos y salgo rumbo al Oeste, voy a tomar un ferry hacia Dunoon y recorrer la parte Oeste de esta área, en vez de ir directo al norte. El clima está sensacional, y sería un pecado usar el tiempo en la autopista! Este, pues, es el plan.
Esperando el ferry para cruzar de Gourock a Dunoon (sin darme cuenta que se había caído la parte derecha del LED del Top Case)
El clima (y la fauna local) muy atractivos
El trayecto fue simplemente fenomenal, casi nada de tráfico y las carreteras prácticamente para mí solo, lo que se me hizo un poco raro pues era durante las vacaciones de verano a plena temporada turística, aunque ya me habré de encontrar los dichosos autobuses por otras partes.
A la hora de rodear el Loch Fyne camino Inveraray, me tropiezo con el restaurant de mariscos Loch Fyne Oysters, y con mucho gusto me paro a engullir una buena comida de mariscos. Ese es el restaurant original de lo que ya es una cadena de restaurantes, fundado por un emprendedor local y su socio, un biólogo marino, pioneros de las "granjas" de ostras en el mismo Lago ("Loch" en Escocés/Gálico). Como me tomo mi tiempo para comer, ya no me dará tiempo para visitar el famoso castillo de Inveraray, lo cual no me molesta pues de visitar castillos, palacios y cosas de esas ya me quedan pocas ganas. Paso de largo del castillo - sin hacer fotos porque no tuve donde detenerme - y continúo hacia mi alojamiento en Onich, poco antes de llegar a Fort William, ciudad que sirve de base a muchos visitantes.
La carretera solita para mí
Rodeando el Loch Fyne
Y me encuentro con esta joyita...
El lugar, muy agradable
Pues habrá que probar el producto local
Llego sin contratiempos a la casa "Tigh Marall" que he reservado en airbnb, donde me esperan ya Margaret y Michael, una pareja Escocesa que me reciben como si me conocieran de toda la vida. Su casa es preciosa y con una vista espectacular.
"Tigh Marall", en Onich
La vista desde mi ventana. He visto peores.
La habitación, comodísima
Así llegamos al final de un día muy largo como de costumbre, pero memorable en todos aspectos. Me doy cuenta que estoy rendido pero es el cansancio del bueno, después de un día activo y relajado. Para mañana no hay plan, ya se nos ocurrirá algo.
La jornada de hoy (sin incluir el vuelo desde Stansted!)
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No está mal aunque yo habría optado por seguir hacia el Norte -de hecho fue lo que hice en su día- recorriendo la margen izquierda del Loch Lomond (en la otra orilla el Parque Nacional de los Trossachs). En cualquier caso pasarás por Inveraray, una pintoresca localidad a orillas del Loch Fyne en la que se encuentra el impresionante castillo del mismo nombre, residencia del Duque de Argyll y cuartel general del Clan Campbell, un lugar de lo mejorcito de Escocia…
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Camellero
Curveando
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Hola Carolus, sí en efecto esa área la reservé para el regreso a Glasgow
Inveraray me encantó aunque no visité el castillo.
Saludos!
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Camellero
Curveando
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Julio 18, 2017
Después de una noche con excelente descanso, Margaret nos inicia el día con un excelente desayuno Escocés - de esos que hacen rechinar las arterias- y bajo la tutela de una buena taza de café me pongo a planear el día. Quiero tirar hacia la costa y un poco al norte, así que me decido por continuar hacia Fort William y de ahí doblaré al Oeste hacia Mallaig, y si llego temprano, tomar al ferry a la Isla de Skye. Solo he reservado una noche aquí en la casa así que si se me hace tarde no tendré ningún inconveniente en quedarme a pasar la noche por allá, aunque la he pasado tan a gusto aquí con mis anfitriones que con gusto me quedo aquí otra noche más. Al mencionar esto a Margaret me dice que mi habitación ya está reservada, pero si regreso me acomodan en otra, aunque más pequeña, lo que no me importa en lo más mínimo.
Ya con una idea de a dónde iremos, salimos a disfrutar de otro día con el tiempo maravilloso (hablo en plural porque incluyo a la moto, jeje)
Del camino a Mallaig, dejaré que las fotos cuenten lo visto y lo andado:
El tren de vapor "Jacobite", mejor conocido como el "Hogwarts Express" en el filme de Harry Potter
En Mallaig no logré abordar el ferry a Skye porque ya estaba totalmente reservado, pero me encontré a mis compañeros de desayuno, una pareja de Alemanes muy agradables y pasamos un buen rato.
Al no haber sido posible subirme al ferry, se presenta el dilema del "adonde me voy", así que decido regresar a Tigh Marall (la casa) pero rodeando parcialmente la "península" formada por el Loch Sunart y el Loch Linnhe. Es una decisión de la que me voy a arrepentir, pues a pesar de que la distancia no aparenta ser mucha, el tipo de carretera y el hecho de que el pequeño ferry de Corran no está operando por haber sido dañado, me van a añadir un par de horas a lo planeado. De eso, ya me enteraré luego, y lo pagaré con creces.
El camino costero al sur de Mallaig
Las vistas simplemente increíbles, y ni un alma a mi alrededor
A las dos horas de haber salido de Mallaig, estoy ladrando de hambre y me encuentro con una verdadera joya de restaurante
"Seafood Chowder" deliciosa
Bok Choi al ajo y mejillones
Intentando esconder el cansancio después de varias horas en la moto
De la mayor parte de la carretera por la "península" no logré hacer fotos pues simplemente no hay ni un centímetro disponible para detenerse, y es demasiado riesgoso pararse en la carretera. Es muy angosta, de un solo carril y espacio solamente para un vehículo, con un área para rebasar cada kilómetro o algo así. A pesar de que hay poco tráfico, los autos que hay van volando, y las furgonetas comerciales van a la puta velocidad del sonido sin importarles que venga otro coche - o moto - de frente. Este camino ha sido un verdadero desafío para mí en lo que se refiere a conducción, no por la velocidad o las curvas, sino por la falta de visibilidad y dimensiones de la carretera. Aunado a lo anterior hay mucha vegetación (no evidente en las fotos) que bloquea casi todas las curvas, y los desniveles del camino son tales que no se ve si viene otro vehículo o no hasta que ya está prácticamente encima.
A pesar de lo hermoso que ha sido el recorrido, la última hora no la disfruto ya para nada, pues el sol ya está bajando en el horizonte y estoy muy cansado. Por fortuna alcanzo a una furgoneta de reparto que va a buen paso, me le pego atrás y la uso de "lazarillo" para que haga el trabajo de guía y ya no preocuparme de que me salga un coche o un camión de repente.
Por fin arribo a Tigh Marall a eso de las seis de la tarde, exhausto y sediento. No me queda más remedio que premiarme con una buena cena y las bebidas adecuadas. Para esto, Michael nos lleva a mí y a los Alemanes a un restaurante de mariscos que está cerca de la casa y que es simplemente espectacular. Así culminamos un excelente día de moto con un paisaje de ensueño, un tiempo fenomenal y mucho aprendizaje de por medio.
Hay que rehidratarse con algo
La rutilla de hoy
Después de una noche con excelente descanso, Margaret nos inicia el día con un excelente desayuno Escocés - de esos que hacen rechinar las arterias- y bajo la tutela de una buena taza de café me pongo a planear el día. Quiero tirar hacia la costa y un poco al norte, así que me decido por continuar hacia Fort William y de ahí doblaré al Oeste hacia Mallaig, y si llego temprano, tomar al ferry a la Isla de Skye. Solo he reservado una noche aquí en la casa así que si se me hace tarde no tendré ningún inconveniente en quedarme a pasar la noche por allá, aunque la he pasado tan a gusto aquí con mis anfitriones que con gusto me quedo aquí otra noche más. Al mencionar esto a Margaret me dice que mi habitación ya está reservada, pero si regreso me acomodan en otra, aunque más pequeña, lo que no me importa en lo más mínimo.
Ya con una idea de a dónde iremos, salimos a disfrutar de otro día con el tiempo maravilloso (hablo en plural porque incluyo a la moto, jeje)
Del camino a Mallaig, dejaré que las fotos cuenten lo visto y lo andado:
El tren de vapor "Jacobite", mejor conocido como el "Hogwarts Express" en el filme de Harry Potter
En Mallaig no logré abordar el ferry a Skye porque ya estaba totalmente reservado, pero me encontré a mis compañeros de desayuno, una pareja de Alemanes muy agradables y pasamos un buen rato.
Al no haber sido posible subirme al ferry, se presenta el dilema del "adonde me voy", así que decido regresar a Tigh Marall (la casa) pero rodeando parcialmente la "península" formada por el Loch Sunart y el Loch Linnhe. Es una decisión de la que me voy a arrepentir, pues a pesar de que la distancia no aparenta ser mucha, el tipo de carretera y el hecho de que el pequeño ferry de Corran no está operando por haber sido dañado, me van a añadir un par de horas a lo planeado. De eso, ya me enteraré luego, y lo pagaré con creces.
El camino costero al sur de Mallaig
Las vistas simplemente increíbles, y ni un alma a mi alrededor
A las dos horas de haber salido de Mallaig, estoy ladrando de hambre y me encuentro con una verdadera joya de restaurante
"Seafood Chowder" deliciosa
Bok Choi al ajo y mejillones
Intentando esconder el cansancio después de varias horas en la moto
De la mayor parte de la carretera por la "península" no logré hacer fotos pues simplemente no hay ni un centímetro disponible para detenerse, y es demasiado riesgoso pararse en la carretera. Es muy angosta, de un solo carril y espacio solamente para un vehículo, con un área para rebasar cada kilómetro o algo así. A pesar de que hay poco tráfico, los autos que hay van volando, y las furgonetas comerciales van a la puta velocidad del sonido sin importarles que venga otro coche - o moto - de frente. Este camino ha sido un verdadero desafío para mí en lo que se refiere a conducción, no por la velocidad o las curvas, sino por la falta de visibilidad y dimensiones de la carretera. Aunado a lo anterior hay mucha vegetación (no evidente en las fotos) que bloquea casi todas las curvas, y los desniveles del camino son tales que no se ve si viene otro vehículo o no hasta que ya está prácticamente encima.
A pesar de lo hermoso que ha sido el recorrido, la última hora no la disfruto ya para nada, pues el sol ya está bajando en el horizonte y estoy muy cansado. Por fortuna alcanzo a una furgoneta de reparto que va a buen paso, me le pego atrás y la uso de "lazarillo" para que haga el trabajo de guía y ya no preocuparme de que me salga un coche o un camión de repente.
Por fin arribo a Tigh Marall a eso de las seis de la tarde, exhausto y sediento. No me queda más remedio que premiarme con una buena cena y las bebidas adecuadas. Para esto, Michael nos lleva a mí y a los Alemanes a un restaurante de mariscos que está cerca de la casa y que es simplemente espectacular. Así culminamos un excelente día de moto con un paisaje de ensueño, un tiempo fenomenal y mucho aprendizaje de por medio.
Hay que rehidratarse con algo
La rutilla de hoy
De hecho son tan estrechas que muchas recurren a las conocidas passing place para poder cruzarse con otro vehiculo
Camellero
Curveando
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Exactamente Mario, nada más de ver esa foto los recuerdos de tener que meterme ahí para escapar de las furgonetas hacen que el culo me haga como narices de conejo
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Tomeu de Mallorca
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Magnífico relato y ademas,estupendamente ilustrado.Gracias
Camellero
Curveando
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Gracias Tomeu, me da gusto que te agrade.
Saludos
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Saludos
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Tomeu de Mallorca
Arrancando
Si como creo,eres piloto,somos colegas,aunque llevo ya 6 años de dulce jubilación
Camellero
Curveando
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Sí en efecto compartimos profesión, y qué ganas de acompañarte en el retiro también aunque me faltan ya solo un par de años!
Un saludo cordial, Kiko
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Camellero
Curveando
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Y bien,
JULIO 19, 2017
Hoy no hay tiempo de hacer turismo y el objetivo es simplemente regresar a Glasgow para guardar la moto en su contenedor y regresar a casa. Como siempre, llevo el tiempo a la medida así que será todo por autopista aunque la distancia no es mucha.
Me cae algo de lluvia durante el camino pero con el mono "Roadcrafter" no me toca ni una sola gota. Llego sin novedad al “Paisley Storage” donde me reciben de maravilla como siempre. A quien se le ocurra seguir estos pasos, el “Paisley Storage” ha sido excelente y sin titubeos lo recomiendo.
Así sin más ni más, meto la moto a su contenedor y tomo un taxi al aeropuerto, que queda a cinco minutos.
Así termina una excelente escapada que he disfrutado al máximo, con la suerte de que me tocó un clima espectacular y - según los locales - muy inusual pues las temperaturas llegaron a los 30 grados.
Obra maestra de ingeniería al romperse una de las cubiertas de los LEDs del Top
JULIO 19, 2017
Hoy no hay tiempo de hacer turismo y el objetivo es simplemente regresar a Glasgow para guardar la moto en su contenedor y regresar a casa. Como siempre, llevo el tiempo a la medida así que será todo por autopista aunque la distancia no es mucha.
Me cae algo de lluvia durante el camino pero con el mono "Roadcrafter" no me toca ni una sola gota. Llego sin novedad al “Paisley Storage” donde me reciben de maravilla como siempre. A quien se le ocurra seguir estos pasos, el “Paisley Storage” ha sido excelente y sin titubeos lo recomiendo.
Así sin más ni más, meto la moto a su contenedor y tomo un taxi al aeropuerto, que queda a cinco minutos.
Así termina una excelente escapada que he disfrutado al máximo, con la suerte de que me tocó un clima espectacular y - según los locales - muy inusual pues las temperaturas llegaron a los 30 grados.
Obra maestra de ingeniería al romperse una de las cubiertas de los LEDs del Top
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Camellero
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Agosto 22, 2017
Afortunadamente a poco más después de un mes conseguí escaparme de nuevo por un par de días para regresar a Glasgow por la Motorka e irnos de vuelta a Inglaterra, esta vez acompañado por mi hijo que acaba de cumplir sus once añitos y está ilusionado con el viaje.
El vuelo a Glasgow transcurrió sin problema alguno y en poco más de siete horas estamos preparando la moto, incluyendo un nuevo casco para mi hijo que entregaron ayer aquí (gracias Amazon!).
Salimos sin demora hacia el suroeste de Escocia donde pernoctaremos para mañana cruzar la frontera con Inglaterra. Tengo ya reserva hecha con AirBnB en Castle Douglas así que por ese lado ya no hay misterios.
El clima es excelente y con la temperatura un poco más baja que la vez pasada, casi no hay nada de tráfico y el camino es prácticamente nuestro con hermosos paisajes que aunque no son de montaña son preciosos. No traemos intercom pero con estos paisajes no hay necesidad de hablar, el aire es fresco y puro y no la falta inspiración al espíritu.
Después de pocas horas llegamos sin novedad a la casa donde nos recibe la dueña con mucha amabilidad y una taza de te caliente.
Como no hay restaurante, vamos al centro del pueblo a un buen restaurante Griego.
Amanece con niebla pero al terminar de desayunar ya se había disipado.
Excelente clima, paisaje y compañía
El mapa no lo refleja pero nos desviamos unos cuantos kilómetros dentro del “Lake District” que es absolutamente hermoso, con carreteras angostas pero en buen estado y sin tráfico.
Edito:
Al final de este viaje dejamos la moto en el centro de Manchester, en una bodega privada llena de autos clásicos, semi-clásicos y uno que otro exótico. La zona no me pinta nada bien pero ya estamos aquí y no hay de otra pues nuestro vuelo de vuelta a Dubai sale en unas horas. Por lo menos espero que no sea muy larga la estadía y poder venir a “rescatar” a la pobre Motorka pronto.
Afortunadamente a poco más después de un mes conseguí escaparme de nuevo por un par de días para regresar a Glasgow por la Motorka e irnos de vuelta a Inglaterra, esta vez acompañado por mi hijo que acaba de cumplir sus once añitos y está ilusionado con el viaje.
El vuelo a Glasgow transcurrió sin problema alguno y en poco más de siete horas estamos preparando la moto, incluyendo un nuevo casco para mi hijo que entregaron ayer aquí (gracias Amazon!).
Salimos sin demora hacia el suroeste de Escocia donde pernoctaremos para mañana cruzar la frontera con Inglaterra. Tengo ya reserva hecha con AirBnB en Castle Douglas así que por ese lado ya no hay misterios.
El clima es excelente y con la temperatura un poco más baja que la vez pasada, casi no hay nada de tráfico y el camino es prácticamente nuestro con hermosos paisajes que aunque no son de montaña son preciosos. No traemos intercom pero con estos paisajes no hay necesidad de hablar, el aire es fresco y puro y no la falta inspiración al espíritu.
Después de pocas horas llegamos sin novedad a la casa donde nos recibe la dueña con mucha amabilidad y una taza de te caliente.
Como no hay restaurante, vamos al centro del pueblo a un buen restaurante Griego.
Amanece con niebla pero al terminar de desayunar ya se había disipado.
Excelente clima, paisaje y compañía
El mapa no lo refleja pero nos desviamos unos cuantos kilómetros dentro del “Lake District” que es absolutamente hermoso, con carreteras angostas pero en buen estado y sin tráfico.
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Al final de este viaje dejamos la moto en el centro de Manchester, en una bodega privada llena de autos clásicos, semi-clásicos y uno que otro exótico. La zona no me pinta nada bien pero ya estamos aquí y no hay de otra pues nuestro vuelo de vuelta a Dubai sale en unas horas. Por lo menos espero que no sea muy larga la estadía y poder venir a “rescatar” a la pobre Motorka pronto.
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Camellero
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14 NOV, 2017
Afortunadamente solo tres meses después me toca operar un vuelo a Manchester con pernocta de 24 horas, la misma que aprovecharé para sacar a la pobre moto del calabozo donde está guardada y llevarla al parking del aeropuerto, ¿porqué ahí? Aaaah! Porque he logrado “reorganizar” mi secuencia de trabajo y he conseguido unos cuantos días libres para regesar y llevarme la moto a Irlanda acompañado del crío. Estos días libres comienzan a mi llegada de este vuelo, así que por eso la moto se quedará 48 horas en el aeropuerto esperándonos.
El vuelo transcurre sin novedad y apenas llegando al hotel me cambio y salgo volando en taxi a la bodega donde está la moto, o por lo menos eso espero. Me costó mucho trabajo comunicarme con el dueño y convencerlo de verme el día de hoy, así que espero que no me salga con alguna excusa.
Llego en apenas 15 minutos y realmente es un lugar horrendo, espero encontrar la moto intacta y sin sorpresas. Me sube el pulso pues el tío no me contesta el teléfono (este es el momento donde la imaginación vuela y puedo ver mi moto en el desguace en venta pieza por pieza). Afortunadamente no es el caso, el tío ya está aquí y esperándome adentro. El lugar y el área son verdaderamente horrendos, me recuerda algún episodio de esas series de televisión donde un incauto desaparece y no lo ven nunca más, hasta que encuentran bolsas de basura con piezas del cuerpo repartidas por media Inglaterra.
La moto está intacta, ahora a prepararnos e irnos de aquí antes de que aparezca alguien con un hacha o botella con cloroformo.
En pocos minutos llego al parking del aeropuerto y sin ningún problema encuentro un espacio exactamente frente a la entrada de la terminal. Dejo una bolsa con la indumentaria sobre el asiento de la moto dentro de la red de seguridad, pongo la cubierta y ya con eso queda empacada la moto y lista para regresar a por ella en un par de días y continuar a Irlanda.
Afortunadamente solo tres meses después me toca operar un vuelo a Manchester con pernocta de 24 horas, la misma que aprovecharé para sacar a la pobre moto del calabozo donde está guardada y llevarla al parking del aeropuerto, ¿porqué ahí? Aaaah! Porque he logrado “reorganizar” mi secuencia de trabajo y he conseguido unos cuantos días libres para regesar y llevarme la moto a Irlanda acompañado del crío. Estos días libres comienzan a mi llegada de este vuelo, así que por eso la moto se quedará 48 horas en el aeropuerto esperándonos.
El vuelo transcurre sin novedad y apenas llegando al hotel me cambio y salgo volando en taxi a la bodega donde está la moto, o por lo menos eso espero. Me costó mucho trabajo comunicarme con el dueño y convencerlo de verme el día de hoy, así que espero que no me salga con alguna excusa.
Llego en apenas 15 minutos y realmente es un lugar horrendo, espero encontrar la moto intacta y sin sorpresas. Me sube el pulso pues el tío no me contesta el teléfono (este es el momento donde la imaginación vuela y puedo ver mi moto en el desguace en venta pieza por pieza). Afortunadamente no es el caso, el tío ya está aquí y esperándome adentro. El lugar y el área son verdaderamente horrendos, me recuerda algún episodio de esas series de televisión donde un incauto desaparece y no lo ven nunca más, hasta que encuentran bolsas de basura con piezas del cuerpo repartidas por media Inglaterra.
La moto está intacta, ahora a prepararnos e irnos de aquí antes de que aparezca alguien con un hacha o botella con cloroformo.
En pocos minutos llego al parking del aeropuerto y sin ningún problema encuentro un espacio exactamente frente a la entrada de la terminal. Dejo una bolsa con la indumentaria sobre el asiento de la moto dentro de la red de seguridad, pongo la cubierta y ya con eso queda empacada la moto y lista para regresar a por ella en un par de días y continuar a Irlanda.
Camellero
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Hola Tomeu, intenté enviarte un privado pero no aparece la opción. Saludos