Como otra aportación a la especial persona que era Antonio es adjunto unos párrafos de la entrada de mi blog que narrar la noche que me ofreció su casa...
Siempre que digo A me refiero a Antonio, mi forma de preservar anonimatos que ahora ya no son necesarios.
Ya en casa, y lo digo como si fuera mía, pues así lo siento y así me lo hace sentir A, observo que el motivo principal de decoración de la pieza principal del piso son las motos, o mejor dicho la moto de A y con el encima, hay varias fotos unas enmarcadas y otras apunto de serlo con las mejores plegadas del propietarios de la casa con su moto, ya dije que es un buen piloto y esas imágenes los confirman. Me brinda la habitación principal con una gran cama para mejor descanso, y con lavabo individual, le agradezco el detalle y acepto, pero era necesario, como ya he mencionado antes duermo en cualquier circunstancia, otra cosa es los que están a tiro de mis ronquidos, de lo cual le advertí repetidas veces...
Una reparadora ducha y la guinda de su amabilidad estaba por llegar, esto es la cena. En un “plis plas” preparó una deliciosa, abundante y surtida ensalada, dos doradas a espalda, y ya tenia a punto una sopa de codillo para entrar en calor, después de las lluvias. Todo delicioso, cambiando alguno de nuestros sexos, Dios no lo quiera, se podría decir aquel tópico que me quería enamorar por el estómago. Amigo A sinceramente te recomiendo que los pruebes ahora que la asignación de las tareas culinarias no es exclusiva de la féminas. Concretamente si yo cocinara así tendría a mi mujer rendida a mis pies, ya que a ella, espero que no me lo tenga en cuenta cuando lea esto, no es la cocina una de sus habilidades predilectas.....
Pero por si esto fuera poco homenaje, la traca final es que A tiene la “mano rota” preparando Mojitos, y ahora si que creo que esto lo utiliza mas que sus habilidades en la cocina, para atraer a su “guarida” “victimas”, de esas que observaba, con peligro de su vida, por las calles de Mojacar... bien perfumadas.....
En nuestro caso el Mojito, o mejor dicho los Mojitos, sirvieron para que tras la cena e instalados en un cómodo sofá con la música adecuada (¡ojo que esto empieza a parecer algo que no es....!), se nos soltara la lengua y nos dieron las 3 de la mañana (todo un record para mi que ni bebo ni trasnocho habitualmente) comentado temas que van desde las motos, pasado por el trabajo, y sobre todo filosofando, que es como mejor se conocen las personas... y si A ya prometía en estas conversaciones confirmó que en Águilas tengo un amigo.
Cuando ya decidimos acabar el día.... o mejor la madrugada, le comento a A, que si le parece a las 7 una buena hora para empezar el último día de mi ruta..., la cara que me pone aunque con las palabras afirma, hace que me apiade y le doy media hora mas de sueño.......
Antes de apagar la luz hago un rápido resumen del día, el mas intenso desde que salí pues al margen de los mas de 1.000 Km. diarios (ya no los cuento), hay que añadir la felicidad de los reencuentros, en Sevilla en Águilas, e incluso el americano solitario. Largo día y corta noche.....
ÚLTIMO DÍA... EL REGRESO...
Suena el despertador y como había supuesto he dormido de un tirón, no mucha horas pero reparadoras. A haciendo gala de ser un gran anfitrión tiene preparado desayuno en cuanto salgo de la habitación con traje de ruta ya puesto..., este chico es un joya, ¡atención chicas que de estos deben quedar pocos!....
Lo dicho un gran tipo' que echaremos de menos..!!