Pingu
Curveando
La semana que viene os cuento la historia de la lanza masai que tengo junto al machete rojo, que también es buena historia. Si el machete era del jefe de Amboseli, la lanza era de un joven masai de Masai Mara. El machete tiene la historia de que era de un jefe. La lanza tiene la historia de una tarde memorable subiendo una montaña con 2 jóvenes masai para tener una gran vista sobre el valle. Los 3 solos mantuvimos una buena conversación sobre dejar de ser niño y pasar a ser hombre, además del ancestral rito de matar a un león para poder ser guerrero masai. Rito que, hoy en día, continúa. Hoy no tengo tiempo y quiero buscar las fotos!