gordologo
Curveando
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- 17 Dic 2004
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Hola a todos.
El viernes pasado, a las 4 de la tarde, en plena autovía...no se si fué un reventón de la rueda, no se si fué aceite en la calzada o gravilla....el caso es que nos caimos de la moto a unos 100 km/h.
Os juro que lo único que se me pasó por la cabeza, mientras daba tumbos por la calzada, era saber Qué Me Paraba.
Sólo pensaba en el puñetero guardarrail. Puse los brazos cruzados por delante del pecho, y pensaba que si me daba contra ellos, aunque perdiera los brazos, no me partirían el pecho.
Los 15 segundos más largos de mi vida.
Las otras heridas, se me irán pasando. (eso espero).
Del resto contar, que estamos vivos aunque jodidos, contusionados, amoratados, abrasados por el asfalto, desanimados, sin moto para muchísimo tiempo ( probablemente nunca más; no soy tan joven), con mucho miedo, y con el ánimo por los suelos.
Allá por donde os movais, hacedlo siempre con el equipo completo.
Del lugar contaros que era en la carretera de entrada a Madrid, por la de colmenar, autovia de 2 carriles y buen asfalto; poco tráfico de entrada a Madrid, aunque si de salida por ser viernes.
Todo iba perfecto, buen tiempo, velocidad normal, sin prisas pues casi que estábamos haciendo tiempo para llegar a un sitio. Pero de golpe y porrazo, en una curva muy muy amplia y por el carril derecho, un movimiento brusco de la rueda trasera, y 4 bandazos a ambos lados, hasta que no pude hacerme con la moto, y salimos despedidos. Mucho ruido del golpe, y cuando paré de dar las 4 ó 5 vueltas por el suelo...el silencio.
Me levanté agarrandome al guardarrail ( estaba pegado a él), en el carril izquierdo. Miré atras y vi a mi mujer tumbada boca arriba a unos 30 metros de mi. No se movía. Fuí hacia ella como pude y vi que estaba viva. No articulaba palabra coherente alguna. La vi heridas por abrasión en las piernas, manos, y la ropa muy destrozada.
Luego, gente a la que le estoy inmensamente agradecido. Una enfermera que nos ayudó, alguien que la tapó con una toalla para que no tuviera frío, una pareja que nos iba recogiendo las cosas que tenia en las maletas y el topcase y que salieron volando...la GC que acudió enseguida y el Suma112 que ya la metieron en la ambulancia a hacerla las primeras exploraciones.
Gracias a todos los que nos ayudaron, y en especial a Alberto que nos metió los restos de las cosas y los cascos en su furgoneta, para que cuando pudiéramos los fuesemos a buscar.
De las heridas, tan sólo preocupante la de mi mujer en la rodilla izquierda, con perdida de tejido del tamaño de una galleta Maria, y que requerirá curas y casi seguro un injerto de piel o un colgajo.
Lo dicho...Los 15 segundos más lentos de mi vida.
Perdonad por el tocho, pero necesitaba desahogarme con alguien.
El viernes pasado, a las 4 de la tarde, en plena autovía...no se si fué un reventón de la rueda, no se si fué aceite en la calzada o gravilla....el caso es que nos caimos de la moto a unos 100 km/h.
Os juro que lo único que se me pasó por la cabeza, mientras daba tumbos por la calzada, era saber Qué Me Paraba.
Sólo pensaba en el puñetero guardarrail. Puse los brazos cruzados por delante del pecho, y pensaba que si me daba contra ellos, aunque perdiera los brazos, no me partirían el pecho.
Los 15 segundos más largos de mi vida.
Las otras heridas, se me irán pasando. (eso espero).
Del resto contar, que estamos vivos aunque jodidos, contusionados, amoratados, abrasados por el asfalto, desanimados, sin moto para muchísimo tiempo ( probablemente nunca más; no soy tan joven), con mucho miedo, y con el ánimo por los suelos.
Allá por donde os movais, hacedlo siempre con el equipo completo.
Del lugar contaros que era en la carretera de entrada a Madrid, por la de colmenar, autovia de 2 carriles y buen asfalto; poco tráfico de entrada a Madrid, aunque si de salida por ser viernes.
Todo iba perfecto, buen tiempo, velocidad normal, sin prisas pues casi que estábamos haciendo tiempo para llegar a un sitio. Pero de golpe y porrazo, en una curva muy muy amplia y por el carril derecho, un movimiento brusco de la rueda trasera, y 4 bandazos a ambos lados, hasta que no pude hacerme con la moto, y salimos despedidos. Mucho ruido del golpe, y cuando paré de dar las 4 ó 5 vueltas por el suelo...el silencio.
Me levanté agarrandome al guardarrail ( estaba pegado a él), en el carril izquierdo. Miré atras y vi a mi mujer tumbada boca arriba a unos 30 metros de mi. No se movía. Fuí hacia ella como pude y vi que estaba viva. No articulaba palabra coherente alguna. La vi heridas por abrasión en las piernas, manos, y la ropa muy destrozada.
Luego, gente a la que le estoy inmensamente agradecido. Una enfermera que nos ayudó, alguien que la tapó con una toalla para que no tuviera frío, una pareja que nos iba recogiendo las cosas que tenia en las maletas y el topcase y que salieron volando...la GC que acudió enseguida y el Suma112 que ya la metieron en la ambulancia a hacerla las primeras exploraciones.
Gracias a todos los que nos ayudaron, y en especial a Alberto que nos metió los restos de las cosas y los cascos en su furgoneta, para que cuando pudiéramos los fuesemos a buscar.
De las heridas, tan sólo preocupante la de mi mujer en la rodilla izquierda, con perdida de tejido del tamaño de una galleta Maria, y que requerirá curas y casi seguro un injerto de piel o un colgajo.
Lo dicho...Los 15 segundos más lentos de mi vida.
Perdonad por el tocho, pero necesitaba desahogarme con alguien.