Supongo que no valdrá de nada, pero al igual que
RomeritoDL yo les he dejado este mensaje en su correo electrónico para desahogarme:
callejros@cuatro.es
Estimados señores,
Soy uno mas de los moteros que se han sentido indignados por su programa, ya que muchos de los que vamos toda la vida sobre una moto no nos sentimos nada identificados con la mayoría de sujetos que mostraron en su programa del día 15.
En los foros de internet (verdadero punto de encuentro e intercambio de información nuestro), se anunció su programa, y éramos muchos los que estábamos esperando su emisión con toda la esperanza de que una vez por todas se mostrara la verdad, y nos ayudaran a conseguir tantas cosas que nosotros necesitamos.
Necesitamos guardarraíles seguros como vieron con ese compañero inválido por uno de ellos, que se elimine la señalización vertical en medio de una curva, o ésta sea deformable como mostró otro compañero, que se deje claro que la Administración es responsable de nuestra seguridad, como se ve en el accidente de un compañero accidentado por culpa del mal estado de la vía......
Lo que no necesitamos, y flaco favor nos han hecho, es que se muestren una vez mas los descerebrados que van en moto sin ser moteros, poniendo en peligro tanto su vida como la de los demás.
No nos gusta el riesgo a la mayoría, somos un colectivo solidario, ¿saben ustedes que una regla de oro nuestra es la de siempre parar a ayudar cuando un compañero lo necesita? ¿saben ustedes que gran parte de las concentraciones que se hacen en nuestro país tienen fines benéficos? ¿saben ustedes que los moteros amamos la vida y por eso odiamos a todo el que se la juega como muchos de los que salieron en su programa?
Siento una gran decepción, me gustaba su programa, y por una vez pensaba que ustedes nos iban a ayudar a concienciar a todos los que nos rodean de que la seguridad es lo primero, y necesitamos que se nos tenga en cuenta mejorando la seguridad de nuestras carreteras.
La moto además de un vehículo por el que muchos sentimos pasión es una verdadera herramienta de trabajo en las grandes ciudades colapsadas de tráfico, y tanto los que las amamos como las que la utilizan como herramienta de trabajo necesitamos la máxima seguridad, que a nadie se le escapa que es un vehículo peligroso, así como lo es el coche y cualquier otro que circule por nuestras carreteras.
Un saludo.