"Esta moto hace buen piloto a los pilotos mediocres"...Es la frase con la que me he quedado, de un dueño de K1600GT, con el que nos hemos cambiado las motos....
La ha dicho con hondo sentir, justo al devolverme mi RT LC..., a lo que ha añadido algo así como:
Va tan bien por las curvas que estaba dándole vueltas a la cabeza, mientras la llevaba...Me he dicho, les llevo la K a los de Dos Rodes y que se la queden mientras me preparan otra RT como éstas.
Tengo que reconocer que durante mucho tiempo estuve pensando en comprar una K1600....El problema estaba en decidir si la GT o la GTL..., cuál me cuadraría más a mis gustos y necesidades. ¡¡Ya veis qué problema!!
Hoy, después de bajarme de ella, me he quitado un gran peso de encima:
Si la hubiera comprado, no habría tardado ni seis meses en venderla...
Y no es que vaya mal. Al revés, nada más subir en ella dices: esto sí es un motón, qué motor más delicioso...., suave como ninguno..., qué empuje...., si no necesitas cambiar de marcha.... Y cómo entra en las curvas...., y cómo sale....Y los retrovisores...., se ve bien por ellos...., y la postura es más natural, con las piernas menos flexionadas....Y la pantalla tapa casi tanto como la de la RT.....Y la piernas van igual o más protegidas....El asiento parece más blando....
Luego, han llegado las curvas. Las abiertas, sin problema. La gran K lo permite todo....Peeeero, ¡ay Dios!, cuando han llegado las cerradas en bajada, enseguida me he acordado de mi K1200GT, pero con mayor complicación aún....La dirección se sentía muy pesada...La larga distancia entre ejes te daba la sensación de que había que hilar muy, pero que muy fino, en la trazada, so pena de salirte a la salida de la curva...., o de tener que hacer una maniobra desesperada a mitad de la curva.
Al poco, tenía una molesta sensación en el estómago, como un bolo que amenazaba con hacer salir el sabroso almuerzo que hacía unos minutos habíamos tomado.
Y me he dicho, a lo mejor ha sido por la bajada, ahora vienen en subida, a ver cómo va la cosa....Y hombre, algo ha mejorado, pero el peso excesivo y las hechuras se dejan notar demasiado si buscas ir a ritmo.... Si eres de los que van solo, a su rollo, o siempre en viajes largos con la pareja, si abundan las autovías y nacionales, quizás es tu moto. Pero no para mí, eso lo he visto claro.
Cuando he tomado la RT, he respirado aliviado al sentir todas sus reacciones, ahora vistas como secas al lado de la untuosa K1600; sin embargo, mi sonrisa de satisfacción llenaba todo el casco..... La RT es algo ruda, sí, sus maneras no son las más refinadas que se pueden encontrar. Como diría el buen amigo Raimundoda, tiene un feo grano en la cara......; peeeero.....¡¡Y qué!!
Es tan buena chica, tan obediente..., tan seductoramente fiel en sus movimientos...., tan absolutamente confiable y predecible, que sabes que nunca te va a hacer un extraño, que siempre te mimará y cuidará con esmero.... Y todo, sea cuál sea el ritmo que le pidas y la carretera por la que transites.
Sí, de acuerdo, algunos dirán: Pero tiene peores materiales que otras, pero el clonk al meter 1ª es insoportable, pero la pata de cabra queda lejos, pero el cardan no es tan fino como el de las japonesas, pero, pero, pero....Seguramente se le podrán encontrar unos cuantos peros más... ¡¡Y en todos tendremos razón!!!
Pero es tan manejable, tan ágil, tan protectora.... y lo hace todo tan bien, que todas estas cosas que en la soledad de tu casa, o al comentarlas en frío en este foro, las veías tan y tan grandes, ¡¡se quedan en nada...., en absolutamente nada.....!!, y se te olvidan en un instante, en cuanto te montas en ella y sales a hacer unas curvas con un grupo de amigos....
Entonces te fijas en su protección....., en los mandos y asiento calefactados......., en las tumbadas y frenada soberbias...., en lo inesperadamente ágil que resulta para el peso que dicen que tiene...., en que de 3ª a 6ª cambias sin apretar embrague y sin que el motor se resienta lo más mínimo..., y en que si cambias como toda la vida, el embrague es pura mantequilla...., y el acelerador con una inmediatez nunca antes vista en una GT....., en que la caja de cambios jamás falla una marcha (nunca he tenido un punto muerto entre marchas)...., en que cuanto más difícil sea la ruta, ella parece tener mejores maneras....
Es entonces cuando te bajas de tu RT LC..... y reconoces que "la Estrella" ha capturado tu corazón, que se lo perdonas todo... y hasta te sientes mal por ser tan exigente ante una moto que te ofrece lo que ninguna hasta entonces te dio: ¡¡una lealtad absoluta!!, ¡¡por fin una moto hecha a la medida humana!!