D
Dani
Invitado
D.E.P.
Follow along with the video below to see how to install our site as a web app on your home screen.
Se debe tener en cuenta: This feature may not be available in some browsers.
Jenofonte dijo:... porque la carretera es muy conocida, porque la hemos bajado mil veces, porque todo el mundo baja rápido, porque aprovechamos la carretera para mejorar nuestra conducción yendo al límite
... demasiado rápido para una carretera que no perdona
... un cabrón poste de quitamiendos asesino el segó la vida
... y que deja una familia destrozada
En primer lugar, lamento el fallecimiento de esta persona y el sufrimiento de cuantos le querían.
Dicho lo cual, me gustaría apuntar algunas consideraciones (aun a riesgo de ser crucificado) que me parecen muy importantes.
Parece que este chico confundió la carretera con el circuito (en el que al parecer tenía experiencia, no se si de haber hecho una tanda un domingo por la mañana, un curso de conducción, o como corredor profesional) con el peligro consecuente.
Obviamente, ya que confundimos la carretera con el circuito, aprovechamos para ir al límite, tal vez incluso cronometrando e intentando bajar los tiempos ciudad-playa playa-ciudad.
En momentos difíciles, lo fácil o lo habitual es buscar un responsable sobre el que descargar nuestra frustración, nuestra ira y nuestra mala leche. Pero el cabrón asesino del quitamiedos, en este caso no es el causante de la tragedia. Como tampoco lo huniera sido el tractor que hubiera podido estar arando el campo adyacente a la curva en la que se produjo el suceso, en caso de haber acabado chocando contra el.
No, las causas del accidente ya han quedado claramente determinadas, así que no busquemos fantasmas donde no los hay.
Y con respecto a lo de la familia destrozada, pues no me cabe la menor duda de que así es, pero también he de decir que él no quería mucho a su familia y menos a si mismo. De lo contrario no iría al límite por una vía pública por la que circulan otros vehículos, tratando de superar quien sabe que clase de absurdo record.
La única pretensión de mis palabras es la de que abramos los ojos, reflexionemos un poco, y seamos consecuentes con nosotros mismos y nuestros actos. Ah, y no olvidemos tampoco que ahí fuera no estamos solos.
En esta ocasión hemos de lamentar y llorar la muerte de una persona, pero con algo más de mala suerte, podríamos estar lamentando la de 3 o 4 si en lugar de encontrarse con un quitamiedos cabrón y asesino, lo hubiera hecho con un coche en el que viajaran unos padres y sus hijos.
Saludos