Hace unos días, en una ruta corta y tranquila, paro a tomar un café y cuando vuelvo y enciendo el motor me sale el aviso de “avería pata telescópica”. Yo, en mi absoluta ignorancia sobre mecánica, creía que era alguna avería en la pata de cabra. Vuelvo directamente al concesionario oficial y, en el momento, hacen unas comprobaciones y me dicen que les deje la moto para diagnosticar mejor la avería. Me sacan de dudas y me explican que de pata de cabra nada, que es un tema que afecta a la suspensión. Dejo la moto (RT 1250 de 2022, con 11.000 km) y a los cinco días me avisan que ya está reparada. Han tenido que cambiar la amortiguación y me han dado la factura y documento de garantía por un importe de algo más de 2.500 euros que, obviamente no he pagado al estar en garantía.
Un servicio y una atención excelentes en el servicio oficial Goya de Zaragoza.