Uno de Nosotros
Aún no puedo creer que se haya ido, la voz quebrada al otro lado de la línea me lo ha confirmado... no, no puede ser... no, no me lo creo... no, no es posible... Mi mente intentaba procesar la información, uno de nosotros ya no estará, por lo menos en cuerpo, pero sí en alma.
Kilómetros de risas, de disfrute, de curvas, de puertos, rutas, aperitivos, kedadas, abrazos y besos, esos besos que odiaba recibir; raspa, pero de gran corazón, un caballero en su montura, rápido, seguro y ligero como el viento.
Uno de nosotros, ya nos falta, aunque alumbrará nuestro camino con sus ráfagas de luz con el resto de los Caballeros caídos.
Uno de nosotros se ha llevado un pedacito de cada uno pero no me cabe la menor duda de que en cada uno de nosotros queda una parte suya.
Ráfagas al cielo.