Un bombero llega a su casa de noche. Con cuidado para no despertar a su esposa, se quita lentamente la ropa en la oscuridad pero, al meterse en la cama, la esposa se despierta y le dice:
- Oye, cielo, tengo un dolor de cabeza espantoso, ¿por qué no vas a la farmacia y me traes unas aspirinas...